Los lunes, revista de prensa y red

“El «ni tutelas ni tu tías» de Casado”, de Antonio Martín Beaumont, y “El aborto liberal”, de Miguel Vidal Santos

(  Viñeta de Idígoras en el diario Sur el pasado día 18 )

EL «NI TUTELAS NI TU TÍAS» DE CASADO

Artículo de Antonio Martín Beaumont publicado en La Razón el pasado día 19

Es muy posible que a lo largo de estas semanas de agosto los miembros más veteranos del PP hayan tenido tiempo de recordar una imagen que forma parte de la historia de su partido: aquel Manuel Fraga, rotundo, rompiendo en 1990 en pedazos la carta de dimisión «preventiva» de un joven José María Aznar al grito de «Ni tutelas ni tu tías».

Pablo Casado logró (tras pelear en la carrera de las primarias contra el aparato del partido y del recién apeado Gobierno de Mariano Rajoy) el asentimiento muy mayoritario de los compromisarios elegidos por los afiliados al Congreso Nacional para sentarse en el «potro de tortura» del presidente del PP.

Un año después, puede decirse que es un jefe sin tutelas. En estos «meses valle», el nuevo presidente del PP no ha estado de brazos cruzados. Ha debido enfrentarse a un carrusel continuo de procesos electorales. Primero, las elecciones andaluzas. Luego, las generales. Seguidas, un mes después, de autonómicas en la mayoría de España y municipales y europeas en todo el país. Vale la pena recordarlo. ¡Ay, qué calvario supone afrontar la confección de unas listas electorales! Pues Casado, recién llegado, ha debido encarar cinco suplicios.

Y los resultados que el PP ha obtenido han sido descorazonadores. Baste decir que sólo cuenta con 66 diputados en el Congreso. Sin embargo, los pactos postelectorales territoriales le han llevado al poder en gobiernos autonómicos sobre un total de 21,8 millones de habitantes y a sentar en ayuntamientos a 2.851 alcaldes. Así que, siguiendo la máxima, tan en boga, de «ganar es gobernar», puede decirse que el «casadismo», cuando prácticamente no ha empezado a levantar el morro, ha salvado las primeras turbulencias a las que se enfrentaba.

El respiro que siempre da agosto también le ha valido a Pablo Casado para convocar la Junta Directiva Nacional (máximo órgano del partido entre congresos) y presentar un nuevo equipo de dirección con el que aspira a reconquistar el terreno electoral perdido. Y el mensaje que ha enviado es nítido: «Solamente rindo cuentas ante las bases». La etapa de corrupción y declive ideológico por la que erraba el PP antes de la llegada de Casado exigía un cambio total de rumbo. Era cuestión de supervivencia.

Ciertamente, la designación de Cayetana Álvarez de Toledo como portavoz en el Congreso provoca repelús a la mayoría del PP. Es un error. Perdió por goleada en Cataluña y, cuando fue diputada, su paso por la Carrera de San Jerónimo tuvo un tono antipático y altivo además de ser infiel con sus compañeros. Todo aconsejaba a Casado mirar hacia otro lado… si bien lo que tiene en las bancadas de la Cámara Baja no permite demasiadas alegrías para elegir. Tampoco las formas de hacer portavoz en el Senado a Javier Maroto han sido las correctas para una etapa donde la regeneración democrática se hace imprescindible.

La salida fulminante de Génova 13 de Marta González (la «enviada especial» de Alberto Núñez Feijóo) y de Vicente Tirado (mano derecha de María Dolores de Cospedal en Castilla-La Mancha) son tan descriptivas que no hace falta ni comentarlas. Y qué decir de retrasar más en Bruselas a Esteban González Pons, alejándole también del comité de dirección del partido… Más allá de cómo ejercieran sus competencias cuando tuvieron mando en plaza, el recado que transmiten los cambios es directo: «Casado es el general en jefe y sólo quiere comandantes de probada lealtad al frente de la tropa». Para bien o para mal. Rajoy tardó más de cuatro años en elegir a su equipo por salvaguardar la paz interna, fue «tirando» con el que puso Aznar… y en el interregno perdió dos elecciones generales (2004 y 2008). El joven líder del PP no desea repetir esa experiencia.

Pablo Casado no quiere ni familias, ni corrientes, ni estrategias asamblearias consensuadas en las baronías. No le faltan razones. Porque esas costumbres no forman parte de la cultura del PP, máxime en un tiempo para el que ha fijado como una de sus prioridades «refundir» el centro derecha («España Suma») para aglutinar a esa «mayoría natural» de españoles que no son de izquierdas y desean vencer al PSOE de Pedro Sánchez. Difícilmente se puede tender la mano a «otros» a cohabitar en la «casa común» si el edificio está lleno de goteras y con las ratas comiéndose los cables de la luz. Meramente sería percibido como una estrategia del que se desangra por su derecha (Vox) y su izquierda (Cs).

Casado ha llegado ligero de equipaje. Es un hombre de partido a quien nadie ha regalado nada… como a la mayoría de jóvenes populares que han accedido a la cúpula, por cierto. Al revés, ha escalado posiciones soportando empujones, codazos y programas de televisión en «horas golfas» que ninguno más aceptaba, y desayunándose «sapos» dando la cara por gentes a las que ni conocía solo porque «eran del PP».

¿Que las formas de renovar no han gustado a muchos? Claro. ¿Que se han percibido como soberbias? Por supuesto. ¿Qué algunos de sus nombramientos chirrían? No cabe la menor duda. Pero la «culpa» la tiene la prisa por retener a una militancia que se alejaba cansada de lo que veía. En realidad, lo que ha hecho Pablo Casado es operar de urgencia a un enfermo moribundo al que todos miraban sobre la mesa del quirófano y ninguno quería meter el bisturí. No le quedaba otra.

Artículo en: https://www.larazon.es/espana/el-ni-tutelas-ni-tu-tias-de-casado-MB24615999

 

EL ABORTO LIBERAL

Artículo de Miguel Vidal Santos publicado en Actuall el pasado día 21

Cuando le preguntan a Isabel Díaz Ayuso por el aborto, la nueva presidenta de la Comunidad de Madrid gira la cabeza, mira para otro lado y se pone a hablar de otra cosa. ¿Y esta es la señora que ha proclamado a bombo y platillo que llega para librar la batalla de las ideas a la izquierda?

Te comunico oficialmente que le hemos ganado la batalla de las ideas a la izquierda gracias a una nueva arma descubierta por un grupo de habladores compulsivos autodenominados “liberales”.

Esta poderosa arma se caracteriza por el ejercicio del cuello al doblar la cabeza con el fin de mirar para otro lado. Verás, te lo explicaré con detalle.

Cuando le preguntan a Isabel Díaz Ayuso por el aborto, la nueva presidenta de la Comunidad de Madrid gira la cabeza, mira para otro lado y se pone a hablar de otra cosa.

La pregunta es muy sencilla y se puede responder con un “sí” o un “no”. Pero…

“PREGUNTA.- ¿Está a favor de la ley del aborto?

RESPUESTA.- Estoy a favor de poner en la mesa todas las medidas que ayuden a las mujeres a que no se vean presionadas a abortar como solución inmediata. Que las dejen pensar con tiempo cómo pueden sacar adelante este proyecto vital y no quiero que ninguna se vea arrinconada ni presionada. Mi competencia no es aborto sí o no, sino esas políticas de acompañamiento familiar y económicas para que ninguna mujer se vea obligada a abortar. No conozco a ninguna que, después de haberlo hecho, se sienta satisfecha. Y no conozco a ninguna que se haya arrepentido de tener hijos.” («Telemadrid debe ser rentable y dar cuentas a su audiencia»)

¿Y esta es la señora que ha proclamado a bombo y platillo que llega a la presidencia de la Comunidad de Madrid para librar la batalla de las ideas a la izquierda?

¿Esta, la quecalla y mira para otro lado? ¿La que no se atreve a decir lo que piensa?

“Ayuso dirigirá el ‘laboratorio de ideas’ del nuevo PP”, dicen los medios. Y los que esperan licencias de radio y muchos ingresos extra vía publicidad institucional, que es la forma “liberal” que tienen los “liberales” de recibir subvenciones, dicen que la nueva presidenta madrileña ha llegado al cargo para combatir ideológicamente a la izquierda.

Y a continuación ponen un ejemplo de su denodada batalla de las ideas y hablan de… ¡feminismo liberal!

Por Tutatis, todo arreglado gracias al “feminismo liberal” de los “liberales” pendientes de subvención. Ya están desmontados todos los chiringuitos y la izquierda anda rindiéndose por las calles, pone a la venta sus sedes y está pidiendo refugio en la embajada de Venezuela. La batalla de las ideas ha concluido gracias al “feminismo liberal”, sea lo que sea lo que eso signifique.

El titular

Traducción: no la cerraremos, ni la venderemos para reducir el inmenso déficit que nosotros mismos hemos creado, de modo que tú vas a seguir pagando de tu bolsillo porque nuestro “liberalismo” consiste en que utilicemos tu dinero para hacer nuestra propaganda.

El ¿fiel? acompañante

Ciudadanos ha de sentirse muy cómodo de la mano de Ayuso, dada la blanda y acomodaticia ideología que manifiestan el partido de Rivera y la presidenta madrileña.

El problema es que Ignacio Aguado está dispuesto a ponerle los cuernos a la primera oportunidad.

No sé qué resulta más llamativo del partido bisagrista malgré lui, si la descarada e infinita soberbia de sus líderes (aquí una imagen del aventajado aprendiz de Pequeño Napoleón, al modo de Albert Rivera), o el tamaño del puñal que guardan en la faltriquera, prestos a utilizarlo sobre sus digamos socios de Gobierno.

Y la pregunta: Ciudadanos estuvo apoyando a un partido corrupto hasta las cejas, el PSOE andaluz, sin un solo aspaviento. ¿Hará lo mismo cuando empiece el diluvio de corrupción sobre el PP madrileño y la nueva presidenta?

Artículo completo en: https://www.actuall.com/medios/el-brief-el-aborto-liberal/

 

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Tres foramontanos en Valladolid

Con el título Tres foramontanos en Valladolid, nos reunimos tres articulistas que anteriormente habíamos colaborado en prensa, y más recientemente juntos en la vallisoletana, bajo el seudónimo de “Javier Rincón”. Tras las primeras experiencias en este blog, durante más de un año quedamos dos de los tres Foramontanos, por renuncia del tercero, y a finales de 2008 hemos conseguido un sustituto de gran nivel, tanto personal como literario.

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