Por José María Arévalo
(Mujeres del campo. Óleo de José María García Fernández, “Castilviejo”)
Van saliendo poco a poco las diferencias de criterio en la Junta de Castilla y León, entre los cargos elegidos por el P.P y los de Vox, y se monta la correspondiente discusión entre medios informativos y políticos. El pasado sábado 12 de agosto titulaba La Gaceta Regional: “La Junta priorizará a la mujer en sus consejerías al contrario de Vox”. Y subtitulaba: “El PP asume que sus ‘socios’ tienen autonomía para gestionar los fondos de carteras como Agricultura, donde han suprimido las ventajas de la mujer para el acceso a ayudas”.
Me ha parecido interesante la opinión de las asociaciones agrícolas, las principales de ellas a favor de lo aplicado por Vox, como veremos. Pero primero vamos con la noticia.
“El sector ‘popular’ del Gobierno de la Junta de Castilla y León no comulga con la medida que sus socios de Vox han tomado desde la Consejería de Agricultura -suprimir el punto que prioriza a las mujeres en el acceso a las ayudas- , pero en lugar de expresarlo con palabras recurren a los hechos. La última orden de ayudas convocada por Agricultura para garantizar el suministro de agua en explotaciones ganaderas extensivas ya no incluye el punto que otorga unos puntos extra a las mujeres, en el caso de que el número de solicitudes supere el presupuesto establecido y no haya dinero para todos. Y no es un hecho aislado, sino que ya han avanzado que será la línea a seguir en próximas convocatorias.
Vox tiene autonomía
El Gobierno de la Junta asume que Vox tiene autonomía a la hora de gestionar los fondos propios de sus tres consejerías (Agricultura, Industria, Comercio y Empleo; y Cultura, Turismo y Deportes), pero su postura es la de seguir priorizando determinadas líneas de ayuda en la figura de la mujer y, más concretamente, en la mujer rural. No hay -por el momento- palabras oficiales desde el PP que condenen la postura de Vox, pero sí lucen hechos que dejan claro que cada partido tiene una hoja de ruta propia.
Las consejerías gestionadas por el PP no pueden ofrecer ayudas a la mujer profesional del campo, como tal, porque es una competencia de Vox, pero sí ofrecen ayudas a la mujer que vive en el ámbito rural y que, por lo general, suele dedicarse al sector primario. El gerente regional de Servicios Sociales, Carlos Raúl de Pablos, pide “que nadie dude del apoyo del PP a la mujer rural, como lo demuestra con una batería de leyes, ayudas, actuaciones…”. “En todas las medidas que se adoptan siempre están previstas actuaciones específicas para las mujeres del medio rural”, recalca. Entre las medidas que la Consejería de Familia e Igualdad ha dirigido específicamente hacia la mujer rural destacan seis iniciativas: “Hemos firmado un convenio para formar a mujeres vulnerables del medio rural en competencias digitales que faciliten su acceso al empleo. De cara a septiembre desarrollaremos un programa de escuela en industrias lácteas -primero Zamora y luego otras provincias- para formar a las mujeres en el ámbito de la ganadería mediante una subvención de 70.000 euros que las especializará en el sector lácteo. Alcanzamos otros convenios con empresas de la Comunidad que se comprometen a incorporar mujeres víctimas de violencia de género y que casos como el de la empresa Gullón se centrarán en mujeres del ámbito rural. En cuarto lugar, destinamos 150.000 euros a todas las federaciones de mujeres rurales para desarrollar proyectos que fomenten la igualdad, la integración y la formación. Existe otra subvención directa para promocionar la igualdad y prevenir la violencia de género. Son 800.000 euros, pero los que irán al medio rural a través de las diputaciones provinciales ascenderán a 430.000 euros. Por último, destinamos otros 80.000 euros para formar a mujeres del ámbito rural con programas de asesoramiento de productos y tecnología”, enumeró Carlos Raúl de Pablos.
Política de partido
Este es solo el primer paso de tres consejerías. Fuentes de Vox han avanzado que la medida adoptada por la Consejería de Agricultura de Castilla y León responde a ‘política de partido’, por lo que esta línea se va a seguir en las convocatorias de las otras consejerías que Vox dirige en la Junta: Industria, Comercio y Empleo; y Cultura, Turismo y Deporte. Al menos, en las convocatorias lanzadas con fondos propios de sus presupuestos, como era el caso.
La Gaceta Regional publica un editorial junto a la noticia en que se pronuncia en contra de este criterio de Vox. Aunque no coincido con el análisis del periódico, creo plantea claramente los términos de la cuestión, por lo que lo reproduzcvo:
“Los hechos de Vox -se titula el editorial-ya preocupan-. Y sigue: “En estas mismas páginas hemos venido defendiendo que la valoración de la presencia de Vox en el Gobierno de Castilla y León debería esperar hasta conocer los hechos de los departamentos en manos de los discípulos de Santiago Abascal. Las palabras, las promesas electorales y algunas declaraciones altisonantes de sus dirigentes sonaban bastante mal, pero existía la duda de si esos juicios de valor y esas propuestas extremas iban a cuajar en decisiones de gestión. Pues bien, con la supresión de los incentivos a la mujer en la concesión de algunas ayudas de la Consejería de Agricultura hemos empezado a comprobar que, por desgracia, Vox va en serio a la hora de cercenar los derechos de las mujeres, en este caso de la mujer rural, pieza fundamental a la hora de conseguir un futuro para el campo. Tal y como confirmó ayer el vicepresidente Juan García-Gallardo, no se trata de una medida puntual, sino de la aplicación de una ideología de rechazo a la discriminación positiva de la mujer que Vox tiene la intención de extender a todas las políticas activas de sus tres consejerías: además de Agricultura, la de Industria, Comercio y Empleo y la de Cultura, Turismo y Deportes. Se trata de la aplicación extrema de los principios de un partido que se declara enemigo del feminismo extremo y que, teniendo algún punto de razón en el rechazo a algunos excesos de políticas concebidas más contra los hombres que en defensa de las mujeres, llevan a los de Abascal a arremeter contra programas de la Junta que han venido funcionando con éxito. Si, como apuntan tanto Vox como alguna organización agraria, hay líneas de ayuda donde se ha primado tanto a la mujer rural que se ha producido una desproporción respecto a los hombres, bastaba con corregir los baremos para encontrar un punto razonable que evite esos excesos. La supresión de todos los incentivos olvida que la mujer, como los jóvenes o los discapacitados, necesitan una discriminación positiva en casi todas las políticas sociales o de ayudas públicas. Además, esa práctica va en contra de lo anunciado en su día por el consejero de Agricultura, que en las Cortes reconoció la necesidad de apoyar la incorporación y la presencia de la mujer en el campo de Castilla y León. La noticia publicada en exclusiva por LA GACETA viene a confirmar que ahora mismo hay dos gobiernos en Castilla y León y que tanto el vicepresidente como los consejeros del partido verde van por libre y ni informan ni acatan la autoridad del presidente de la Junta. En esta tesitura, Alfonso Fernández Mañueco debe asumir la necesidad de reconducir las políticas de sus coaligados o Castilla y León se convertirá en el mejor argumento del PSOE para azuzar el miedo a la ultraderecha”.
Cuotas de género absurdas y discriminatorias
Por su parte el vicepresidente de la Junta escribe en su perfil de Twitter que Vox rechaza ‘cuotas de género absurdas y discriminatorias’ – “las mismas que apoyó su consejero Dueñas” dice La Gaceta-. Juan García-Gallardo, vicepresidente de la Junta de Castilla y León, se mostró ayer orgulloso de la decisión tomada de suprimir la prioridad de la mujer en el acceso a ayudas. En su perfil de Twitter el vicepresidente rechazó “cuotas de género absurdas y discriminatorias”. “Trabajamos para ayudar a toda la gente del campo, que son esenciales para Castilla y León y España. Se les está cuidando más que nunca en lo económico y social, pero sin cuotas de género absurdas y discriminatorias”, dice.
Sus palabras contrastan, sin embargo, con las del consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Gerardo Dueñas, también de Vox, quien en su comparecencia en las Cortes de Castilla y León del 18 de mayo y en una respuesta al procurador socialista, Juan Luis Cepa, dio a entender que potenciaría a la mujer. El salmantino Cepa le recriminaba que en su intervención, en la que desgranaba los objetivos de la legislatura, no hubiera hecho ninguna mención específica a la Estrategia de la Mujer Rural Emprendedora, que prioriza por género. “Quiero que me explique -decía y según recoge el Diario de Sesiones de las Cortes de Castilla y León- si ese programa se va a mantener o dentro de su ideología quiere que ese programa desaparezca”. Dueñas respondía que “no es que nos las vayamos a cargar, sino que la prevalencia, el desarrollo, evidentemente pasa por potenciar. O sea, hay actividades… en el mundo rural, si no hay mujeres, no hay vida”. En la misma sesión la entonces procuradora de Vox, la también salmantina Teresa Rodríguez, ahora directora general de Producción Agrícola y Ganadera, defendió que su partido pone a la familia en el centro de las políticas públicas “dando igual importancia a la responsabilidad del hombre y de la mujer en el negocio agrario, potenciando los valores que caracterizan a cada uno de ellos”. Rodríguez Vidal también defendió en ese momento las ayudas a la Estrategia de la Mujer Rural porque, dijo entonces en declaraciones a los medios de comunicación, su partido tiene “la clara percepción” de que “el asentamiento de las familias en el medio rural favorecerá el mantenimiento de población activa”. La procuradora asumió que “casi todas las ayudas vienen cofinanciadas por la Unión Europea”. “Por lo tanto, nosotros ahí poco podemos decir”, apostilló. “Es tan eficaz y tan válido el hombre como la mujer en el negocio del sector agrario, sin entrar en la diferenciación de la eficacia o eficiencia en la gestión de explotaciones agrarias”, añadió
ASAJA y COAG apoyan la medida de Vox
ASAJA y COAG apoyan la medida de Vox: “A favor de ayudar a la mujer, pero no con tal desequilibrio”. La medida de Vox que acaba con la prioridad a la mujer para al acceso a ayudas hace reflexuinar a las principales organizaciones agrarias. ASAJA es la que más a favor se muestra de la decisión adoptada por la Consejería de Agricultura. Juan Luis Delgado considera “de sentido común” que “si se saca una convocatoria para una ayuda, el sexo no tenga que ver”. “Esta ayuda se concibe para auxiliar un problema puntual que ponga en peligro las explotaciones y no debe haber limitaciones de sexo”, argumenta Delgado, que matiza: “Apoyamos los incentivos a las mujeres, pero no en este caso”.
En términos similares se expresa José Manuel Cortés (COAG). “El problema es que hubo una línea de ayuda para la digitalización y el 70% de la ayuda se utilizó en mujeres porque no estaba equilibrado. Entiendo que Vox ahora quiera corregir ese desequilibrio en otras ayudas. Apoyamos que haya ventajas, pero no con ese desequilibrio”.
En la línea opuesta se expresa Carlos Sánchez (UPA). “A la mujer no se la ha cuidado y se la ha abandonado. Una forma de que se quede es que tenga ciertas referencias. Un motivo de despoblación es que la mujer no encuentra trabajo en el medio agrario, se marcha y detrás van los hombres”.