Si pensamos en cómo ha sido la evolución de las últimas décadas en lo referido a frenar la alopecia, en lugar de para un post, nos daría para escribir un libro. Por eso, preferimos resumirte cuáles son, gracias a la evolución tecnológica, las armas más potentes con las que contamos para ponerle solución a la calvicie.
TÉCNICA FUE.
Es el acrónimo de Follicular Unit Extraction, o lo que es lo mismo, la extracción individual de los folículos. Uno a uno, para garantizar el máximo éxito en la operación y poder darle al resultado final una mayor naturalidad. Es mínimamente invasiva y deberá someterse el paciente al rapado total de la cabeza y a anestesia local para evitar cualquier tipo de molestia.
TÉCNICA DHI.
Consiste en el injerto pelo a pelo de cada uno de los folículos mediante el uso del Implanter, una de las últimas novedades tecnológicas en lo que se refiere a la lucha contra la alopecia. Gracias a este aparato, los profesionales encargados del injerto capilar podrán ser extremadamente precisos, manteniendo el grado de inclinación exacto de los folículos.
TRATAMIENTO PRP.
Se trata del uso del Plasma Rico en Plaquetas, muy útil para la pérdida moderada de cabello. Frena la caída y además facilita la regeneración de los folículos. No es nada invasivo, no requiere de hospitalización ni anestesia y es totalmente efectivo ya que se logrará aumentar la vascularización del folículo, mejorando la circulación y favoreciendo la producción de colágeno, elástina y ácido hialurónico.