Los amantes de la comida india están de enhorabuena: según un nuevo estudio llevado a cabo por la Universidad de Californa en Los Ángeles, el consumo diario de cúrcuma, el ingrediente clave del curry, podría aportar beneficios cognitivos debido a su capacidad para reducir la inflamación cerebral, lo que la haría útil para combatir enfermedades como el Alzheimer o la depresión mayor.
La curcumina, comúnmente conocida como cúrcuma, es el extracto de una planta con el mismo nombre, cúrcuma longa, nativa del suroeste de la India. Ahí se utiliza desde la antigüedad, como colorante textil primero y más adelante como especia, siendo una de las más empleadas en la gastronomía india, que ha extendido su popularidad al resto del mundo. En Europa se conoce como E-100i, un aditivio alimentario; algunos países latinoamericanos la llaman palillo o azafrán de raíz, y también es popular en Japón, donde se sirve junto al té, según recoge Claudia Loring en La Vanguardia.
El curry es uno de sus usos más populares, siendo la cúrcuma la causante de ese color amarillo tan intenso, pero también se emplea como colorante en mostazas, preparados para sopas y caldos, licores, y algunos productos cárnicos y lácteos: mantequillas, quesos o pastelería. Se utiliza asimismo en cosméticos, protectores solares e incluso hay mujeres hindúes que la usan como gomina. Puede ser, además, aromatizante.
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