Si estás planeando un viaje al país del «Sol Naciente», Japón, es importante que tengan bien en cuenta las siguientes recomendaciones.
Contacto Travellers @monzonpaul
Pasaporte: Todos los visitantes extranjeros que deseen entrar en territorio japonés deben disponer del pasaporte en vigor.
Visado: Los ciudadanos de muchos países no necesitan visado para visitar Japón por un tiempo limitado, siempre y cuando no ejerzan ninguna actividad remunerada. En el caso de los viajeros españoles, podrán permanecer en el país del sol naciente tres meses como máximo. Aconsejamos recurrir de nuevo a la web del Ministerio de Exteriores (MAEC) para saber cómo actuar en caso de pérdida o robo del pasaporte, aunque se recomienda contactar inmediatamente con la Embajada.
Registro de viajeros: Antes de viajar a Japón o a cualquier otro país del extranjero, es preferible que registremos nuestros datos en el MAEC para facilitar la atención en caso de situaciones de emergencia o necesidad.
Seguro de viaje: Las autoridades japonesas vienen recomendando encarecidamente la contratación de un seguro de viaje a Japón para quienes vayan a visitar el país a partir de enero de 2019. «El seguro de viaje le dará tranquilidad, incluso en caso de emergencia, y le permitirá disfrutar de su viaje.
Los gastos médicos en Japón pueden resultar caros, pero si contrata un seguro que ofrezca suficiente cobertura, podrá recibir los tratamientos necesarios sin problemas».
Además, tal y como recomiendan las fuentes oficiales, aconsejamos optar por «un seguro de viaje internacional que incluya asistencia en hospitales de referencia, servicios de traducción y que no requiera de pago inmediato en efectivo por parte del asegurado en el momento de recibir la atención médica», como es el caso de los seguros de viaje InterMundial.
Vuelos a Japón y el impuesto ‘Sayonara’
Uno de los mayores gastos del presupuesto de un viaje a Japón suele ser el vuelo. El precio de los vuelos a Japón suele estar entre los 450 y los 800 € dependiendo de la temporada. En octubre de 2016 se inauguró un vuelo directo entre Madrid y Tokio con Iberia, aunque a veces las combinaciones con escala con otras compañías pueden salir muy bien de precio.
Si eres tú mismo el que va a comprar los billetes, es recomendable que mires casi a diario en buscadores de reservas de vuelos, ya que las aerolíneas suelen cambiar las tarifas con bastante frecuencia. Cuanto antes empieces a buscar tu vuelo para Japón, mucho mejor, especialmente si quieres viajar en verano o en primavera, que son las temporadas altas.
Desde el 7 de enero de 2019 Japón ha impuesto una nueva tasa a cada pasajero que salga del país por avión o por barco. El impuesto Sayonara, de 1.000 yenes (8,03 euros / 9,27 dólares), será cargado directamente en los billetes de avión y de barco comprados y afectará tanto a extranjeros como a japoneses mayores de dos años o a quienes realicen estancias superiores a 24 horas. No deberán pagarlo aquellos que hagan escala en los aeropuertos o puertos del país.
Dónde dormir
Hospedarse en Japón puede resultar en determinadas épocas del año una tarea titánica. El turismo asiático es uno de los más importantes en ciudades como Tokio, Kioto u Osaka y este tipo de viajeros suele reservar sus estancias con mucho tiempo de antelación.
Te recomendamos que busques tu alojamiento en Japón con un mínimo de dos meses de anticipación, especialmente en temporadas como la de la floración de los cerezos que suele ser en primavera.
Por lo general, los alojamientos suelen ser muy limpios y disponen de un servicio y atención al cliente excelente. Los horarios de entrada suelen ser a las 15:00 horas y los de salida a las 11:00 horas. Vamos a ver qué opciones tienes.
Hoteles cápsula, Internet cafés o manga cafés: Son probablemente los alojamientos más asequibles en las grandes ciudades, ya que se contratan por horas. Son recomendables para viajar a Japón durante una estancia muy corta o por si pierdes el último tren. Son espacios muy reducidos, aunque cuentan con conexión a internet, máquinas de bebida, comida y también duchas.
Albergues juveniles, Hostel o Minshuku: De los alojamientos tradicionales son los más económicos. Los tienes con habitaciones compartidas y baños comunes, aunque por lo general son muy limpios y silenciosos, una tónica en los establecimientos japoneses. Los Minshuku son los equivalentes japoneses a los B&B.
Ryokan: es el nombre con el que se conoce a los hoteles tradicionales en Japón. Los suelos son de tatami y se duerme sobre futones en el suelo. Suelen tener precios bastante elevados, pero si te lo puedes permitir deberías dormir al menos una noche en este tipo de alojamientos para disfrutar de la experiencia y de la hospitalidad japonesa. Muchos de ellos sirven comida tradicional y cuentan con un ofuro u onsen para que te relajes en agua caliente. Algunos están ubicados en emplazamientos únicos en plena naturaleza.
Hoteles: de estilo occidental, los hay repartidos por todo el país. Puedes encontrar alojamientos de súper lujo y algunos familiares y más modestos, pero en líneas generales los precios son más elevados que los que puedes encontrar en España.
Todos suelen tener algún toque oriental, ya sean con el tipo de cocina que sirven o con los modernísimos WC con botones. Muchas de las grandes cadenas internacionales tienen hoteles en Japón, ya sean de lujo o precio medio. Es muy importante reservar con tiempo, especialmente en primavera.
Salud
En general, las condiciones sanitarias en Japón son excelentes. En casi todas las grandes ciudades y pueblos de tamaño medio es relativamente sencillo recibir asistencia médica de calidad, aunque los precios son muy elevados y en la mayoría te cobran por adelantado. Para viajar a Japón, es mejor que pilles un pequeño botiquín con medicamentos que tomes diariamente o aquellos básicos a los que puedas recurrir en un momento dado, como los antiinflamatorios o analgésicos.
A día de hoy los viajeros extranjeros no necesitan un certificado de vacunación independientemente del país del que procedan. No es obligatoria ninguna vacuna para viajar a Japón. No obstante, antes de cada viaje es recomendable consultar la web del Ministerio de Sanidad o informarse en los Centros de Vacunación Internacional por si la regulación cambiase.
Seguro para viajar a Japón
La contratación de un seguro de viaje es más que recomendable antes de tu viaje a Japón. En primer lugar, porque viajar al país del sol naciente no es precisamente barato y requiere bastante antelación en las reservas de transporte, alojamiento y excursiones. En este sentido, es muy importante contar con un seguro de viaje como Totaltravel para estar cubiertos en caso de anulación del viaje, lo cual nos aportará mucha tranquilidad. Los billetes de vuelos directos a Japón suelen agotarse con mucha rapidez y lo más seguro es que te toque hacer varias escalas. El seguro de viaje te cubrirá las posibles pérdidas de conexiones o el extravío, demoras y daños en el equipaje. Por lo general, Japón es un país muy seguro pero la asistencia sanitaria es muy cara, así que asegúrate de estar cubierto en caso de que necesites visitar el médico o el hospital. Éstas y otras coberturas adicionales como las destinadas a la práctica de deportes de riesgo están contempladas en la póliza de InterMundial, ideal para un destino como Japón.
La mejor época para visitar Japón
Dependiendo de la época del año, tu viaje a Japón puede ser completamente distinto, así que la temporada que escojas puede influir bastante en lo que hacer y lo que ver en Japón.
En verano el calor que suele hacer en las zonas más turísticas suele ser asfixiante y con mucha humedad. También hay muchas posibilidades de lluvias torrenciales con riesgo de tifones al final de la estación más calurosa. No obstante, en verano se celebran alguno de los festivales o matsuris más importantes de todo el país, como pueden ser el Gion Matsuri en Kioto, el Tenjin Matsuri en Osaka o el Samba Matsuri en el barrio de Asakusa de Tokio.
En invierno el clima es muy similar al de España, aunque las temperaturas suelen ser más rigurosas y no es extraño ver nevadas y temperaturas muy bajas incluso en Tokio. En la norteña isla de Hokkaido o en los Alpes Japoneses hay muchas estaciones de esquí y el invierno es mucho más duro. Si viajas en esta época no te pierdas el Yuki Matsuri de Sapporo.
Probablemente el otoño sea una de las mejores épocas del año para viajar a Japón, pues las temperaturas son muy agradables y los principales atractivos del país están menos masificados. Te maravillarás con los tonos rojizos de la naturaleza en lo que allí llaman el momiji, especialmente en lugares como Nikko, Hakone o Miyajima.
La primavera es la verdadera temporada alta en Japón por el fenómeno del hanami o la explosión de cerezos en flor y también por la denominada Golden Week en la que los japoneses disfrutan de unos días de asueto. Tanto la naturaleza como las grandes ciudades están repletas de pequeños pétalos de flor de cerezo que dibujan una increíble estampa por de todo el país. Las temperatura suelen ser muy agradables, aunque suele llover y hacer frío hasta mediados de abril. En mayo ya no quedan demasiados cerezos en flor pero puedes disfrutar del Sanja Matsuri de Tokio o de las mejores competiciones de sumo.Encuentra en este artículo qué ver en Japon.
Consejos durante tu viaje a Japón
Seguridad
Japón es probablemente uno de los países más seguros del mundo. Los índices de criminalidad son muy bajos y la hospitalidad de los japoneses es legendaria. En pocos destinos en el mundo puedes vivir esa sensación, aunque como es lógico en todo momento debe imperar el sentido común.
Sin embargo, la ubicación de Japón lo sitúa en un área de riesgo sísmico y de tifones (especialmente al final del verano). Ambos fenómenos son especialmente controlados por las autoridades y los edificios están diseñados para soportar muy bien los desastres naturales.
En las grandes ciudades y pueblos suele haber muchísimos koban o edificios de la policía que te ayudarán en todo momento. También debes tener especial cuidado con el tráfico en las capitales, aunque los conductores japoneses suelen ser muy escrupulosos con las normas de circulación y respetan los semáforos y señalizaciones.
Transporte
Japón cuenta con uno de los sistemas de transporte más avanzados del mundo, especialmente si hablamos de ferrocarriles. Lo mejor para desplazarse de una ciudad a otra es el tren, ya que cuenta con una red extraordinaria y vehículos rapidísimos (y caros) como los shinkansen o trenes bala.
Los extranjeros podemos adquirir antes del viaje los denominados JR Pass, un pase que nos permite viajar libremente en la mayoría de medios de transporte que gestiona la compañía Japan Railways Group (JR) por todo Japón. Lo pueden adquirir personas sin nacionalidad japonesa y cuyo motivo de visita a Japón sea el turismo. Por tanto, se excluyen a todas las personas que tengan visados de trabajo o para estancias mayores de 90 días. Existen pases de 7, 14 y 21 días consecutivos. Los precios dependen de si escoges el pase verde (primera clase) o el de turista (segunda clase). Los niños (6-11 años) pagan la mitad y lo habitual es reservar el pase turista, ya que los trenes japoneses son excelentes. El JR Pass de una semana suele costar unos 240 € y se puede comprar en cualquier agencia de viajes o en los distribuidores oficiales donde siempre será más barato.
Para moverse en Tokio u Osaka, grandes ciudades, es muy recomendable utilizar el metro. Este servicio destaca por su puntualidad y también porque cubre prácticamente todos los barrios de las metrópolis. En el área metropolitana de Tokio, por ejemplo, hay 13 líneas de metro privadas y 37 de JR. Si vas a pasar una temporada larga en Japón, es interesante comprar una tarjeta Suica o Pasmo para moverte en transporte público y hacer pequeñas compras. La primera vez que las compras pagas un depósito de 500 yenes (4 euros) y luego se pueden recargar fácilmente en las estaciones de metro.
En Kioto y en las ciudades de tamaño medio funciona muy bien los servicios de autobuses. También los taxis, aunque son caros y probablemente necesites la dirección a la que vas en alfabeto japonés. No olvides que las puertas se abren y cierran automáticamente.Ir a Japón: como moverse
Qué comer en Japón
Sin duda, uno de los mayores placeres de viajar a Japón es disfrutar de su auténtica gastronomía. Verás pequeños y grandes restaurantes por doquier, generalmente especializados en un tipo de comida. Si te gusta el sushi vas a alucinar con la calidad, y probablemente te sorprendan los precios, ya que en España la comida japonesa suele ser muy cara.
Puedes comer una buena sopa de fideos, carne empanada o yakitori por unos 1.000 yen (8,6 euros). La mayoría de restaurantes y puestos tienen los menús en kanji o alfabeto japonés, pero suelen tener réplicas de los platos que cocinan en plástico para que los puedas señalar con el dedo y te los preparen. Por lo general, las medidas higiénicas suelen ser muy buenas y la comida de muy buena calidad.
En cuanto a las bebidas, hay muchísima variedad. Por todo Japón hay repartida máquinas expendedoras o tiendas 24 horas. Puedes dirigirte a un izakaya donde podrás comer un poco de todo y además beber cerveza o sake.
Dinero
Ten en cuenta que puede introducir o sacar de Japón todas las divisas que quieras, aunque si la cantidad supera el millón de yenes deberás declararlo en la aduana. Hay monedas de 1 yen, 5 yenes, 10 yenes, 50 yenes, 100 yenes y 500 yenes y billetes de 1.000, 2.000, 5.000 y 10.000 yenes.
Es muy recomendable viajar a Japón con efectivo, ya que se suele utilizar mucho (por lo general en todos los países de Asia) Nada más llegar a los aeropuertos internacionales hay oficinas de cambio de divisas o cajeros que admiten tarjetas extranjeras.
A la hora de pagar en Japón, la tarjeta de crédito es aceptada en restaurantes y establecimientos de cierto nivel, aunque por lo general se utiliza el efectivo. En general, en los cajeros automáticos de los bancos japoneses no se aceptan las tarjetas extranjeras, aunque la situación está cambiando los últimos años. Lo más sencillo es utilizar los cajeros automáticos disponibles en las oficinas de correos de Japón o los que hay cerca de las tiendas de conveniencia. No hay costumbre de dejar propina.
