SOY CONTRARIO AL TEMERARIO
Yo prefiero, de ordinario,
A quien el peligro ignora
Y el riesgo no le encocora,
Es decir, al temerario,
Su contrario, su adversario,
Quien temblor de piernas tiene
Y en sus trece se mantiene,
Quiero decir, quien no cede
Y a sí mismo se concede
Lo que vivo o en pie sostiene.
Ángel Sáez García
[email protected]