El blog de Otramotro

Ángel Sáez García

En Cataluña sigue el esperpento

EN CATALUÑA SIGUE EL ESPERPENTO

Por obra y gracia de un pelele sin ninguna ídem, en Cataluña sigue el esperpento. Y, una de dos, o alguien, mancomunado con otros, decide lo que conviene culminar con urgencia, poner pronto remedio a tanta indignidad, dejando al ababol arrumbado en el rincón más oscuro del cuarto donde se suelen guardar (para luego tirar a la basura) las naderías o simplezas, o continuará el espectáculo bochornoso, haciendo aún más daño o deteriorando un poco más, si cabe, que sí, que cabe, las instituciones dependientes de la Generalitat y a las personas, catalanas o no, epatadas por un cristo adicto al cristo o ahítas de tener que soportar, un día sí y otro también, las tomaduras de pelo ideadas o propuestas por un politicastro, un mandatario de tres al cuarto.

La sociedad española, ante tanta afrenta o suciedad, que solo puede producir saciedad, da muestras ya de una notoria indiferencia ante el nuevo caso de indecencia democrática llevado a cabo en el Parlament con los votos de los representantes secesionistas, al modificar la Ley de Presidencia, a fin de permitir una investidura a distancia de Carles Puigdemont. El Consejo de Estado, por unanimidad, ya ha emitido un informe favorable al criterio del Ejecutivo de presentar un recurso ante el Tribunal Constitucional contra la reforma de dicha ley. Ayer leí, en la página 10 del número 2.171 de El País Semanal, en el artículo “La psicología política de los colores”, de Manuel Rivas, una frase de Stefano Mancuso, director del Laboratorio Internacional de Neurobiología Vegetal de la Universidad de Florencia, que acaso explique los delirios de grandeza que vienen padeciendo Puigdemont y sus secuaces: “las personas competentes no compiten; solo compiten los incompetentes” por ver quién dice la mayor sandez o se adjudica o esfuerza para que le atribuyan, qué codicia, como baldón ultrajante, la peor muestra de impericia.

Lo último que ha trascendido del sujeto en cuestión (al que, como siga así, me temo, habrá que sujetar con una camisa de fuerza, por orate), aficionado a hollar o pisotear toda ley que no le guste, que no diga lo que él anhelaría que dijese, es su exigencia de que nadie ose pisar las estancias del palacio de la Generalitat que él considera de su única propiedad y uso exclusivo.

Como el día 22 de mayo, si no hay president antes de dicha fecha, se disolverá el Parlament y se convocarán elecciones para el 15 de julio, Junts per Catalunya quiere investir un candidato antes del próximo lunes, 14. Aunque reconocen que todo está en el aire o aún muy verde (y es que no han tenido tiempo, porque se lo han pasado o lo han invertido en marear una perdida perdiz a la que no lograban dar caza y ponerle el preceptivo lazo amarillo), son conscientes de que una espada de Damocles pende sobre sus cabezas, porque la suspensión para el ejercicio de cargo público de los diputados procesados por rebelión en la causa abierta por el “procés”, que instruye el magistrado del Tribunal Supremo Pablo Llarena, está al caer, es inminente. Y como, cuando esta sea firme, la suspensión será automática, el plazo es el que es y, si ocurre, verbigracia, esta semana, eso obligaría a los diputados afectados a renunciar a sus actas para mantener la mayoría independentista en el Parlament.

He guardado para el párrafo final, como epítome y remate de esta urdidura (o “urdiblanda”) la décima que he titulado “Venid; a mí ir me da risa” (y he subtitulado “Dice con sorna, sin prisa”), en cuyos diez versos he procurado fundir las contradicciones que he advertido en el proceder que exige uno y siguen otros: ¿Merece una poesía / Quien vive en Berlín ahora, / Puigdemont? ¡Tanto le adora / Que a rendirle pleitesía / Voló su feligresía! / Quien a don Carles frecuenta / ¿Por qué no se ha dado cuenta / De que no tiene sentido / Que él quiera ser investido / A distancia? ¡Vaya afrenta!

Ángel Sáez García
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Ángel Sáez García

Ángel Sáez García (Tudela, 30 de marzo de 1962), comenzó a estudiar Medicina, pero terminó licenciándose en Filosofía y Letras (Filología Hispánica), por la Universidad de Zaragoza.

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