En La Retaguardia de este lunes 23 de junio, Eurico Campano analiza con Gustavo Martínez la situación que le crea a Pedro Sánchez con el cerco cada vez más estrecho de la UCO sobre Cerdán y Ábalos.
El socialismo español vive su semana más aciaga desde los años de los ERE. José Luis Ábalos, antaño escudero fiel de Pedro Sánchez y figura central del primer Gobierno de coalición, ha decidido romper su silencio. Lo ha hecho con estrépito: no sólo está dispuesto a reconocer ante el juez los amaños de contratos en su etapa como ministro de Transportes, sino que ha situado a Santos Cerdán —actual secretario de Organización del PSOE y mano derecha de Sánchez— como epicentro de la presunta trama corrupta. La sombra del procesamiento planea ya abiertamente sobre “pucheritos” Sánchez, apodo que circula en pasillos políticos tras los evidentes nervios del presidente en sus últimas comparecencias.
La escena es digna de un thriller político. A pocas horas de declarar ante el Tribunal Supremo, Ábalos y su exasesor Koldo García se reunieron durante cuatro largas horas en un despacho madrileño, preparando estrategias para una comparecencia que puede decidir el futuro inmediato del socialismo español. El exministro ha optado por “tirar de la manta”, según fuentes próximas a su defensa, cansado de lo que considera traición y abandono por parte del núcleo duro sanchista.
De escudero a testigo clave: el giro dramático de Ábalos
La crisis estalló tras meses de filtraciones, informes demoledores de la UCO y la aparición de grabaciones comprometedoras. Ábalos, expulsado del partido días atrás y enfrentado a un horizonte judicial sombrío, sopesa un pacto con la Fiscalía Anticorrupción para rebajar su posible condena. Pero para ello debe aportar algo más que lo ya conocido: hechos inéditos que impliquen a actores aún no señalados oficialmente por la Justicia.
Lo relevante es que, según ha trascendido, el exministro está dispuesto a detallar cómo funcionaba la maquinaria interna del partido para adjudicar contratos públicos amañados y repartir mordidas. Sitúa a Cerdán como “instructor” principal y afirma que este actuaba con pleno conocimiento —o incluso bajo las órdenes— del propio Pedro Sánchez. Entre las perlas soltadas a su entorno, Ábalos se pregunta dónde acababa el dinero restante de las comisiones: “¿En el partido? ¿En República Dominicana?” No acusa directamente al PSOE de financiación ilegal, pero siembra sospechas serias sobre el destino final de los fondos.
Una causa judicial que no deja títere con cabeza
La conocida como trama Koldo investiga presuntas comisiones ilegales ligadas a contratos sanitarios durante la pandemia. Según informes policiales e indagaciones periodísticas, las contraprestaciones económicas habrían superado los 600.000 euros solo en mordidas gestionadas por Cerdán para Ábalos y Koldo García. El cerco judicial incluye registros en sedes socialistas y dispositivos electrónicos incautados en casa del exministro (incluyendo un disco duro oculto en los pantalones de una amiga).
No solo Ábalos está bajo lupa. El hermano del presidente, David Sánchez, también ha sido procesado recientemente por presunta prevaricación y tráfico de influencias tras un contrato “a medida” en la Diputación de Badajoz, lo que añade más leña al fuego reputacional que asola al entorno monclovita.
Implicaciones políticas: Sánchez más solo que nunca
El silencio oficial del PSOE contrasta con la inquietud creciente entre sus filas. La posibilidad real de que Ábalos pacte con la Fiscalía y aporte pruebas inéditas podría abrir una cascada de imputaciones que alcanzara niveles insospechados hace solo unas semanas. Los analistas coinciden: si prosperan las confesiones y se demuestra conocimiento o consentimiento por parte del presidente, Pedro Sánchez quedaría políticamente herido… o incluso judicialmente señalado.
En Ferraz se respira preocupación por un deterioro acelerado de la imagen pública socialista. Las encuestas internas alertan ya de una fuga masiva de apoyos hacia partidos rivales si se confirma la implicación directa o indirecta del presidente en el escándalo.
Curiosidades y datos insólitos del caso
- El mote “pucheritos” Sánchez se lo ha ganado el presidente tras sus últimos discursos, donde las lágrimas han corrido tanto como las excusas.
- El disco duro clave incautado a Ábalos estuvo a punto de ser ocultado… ¡en los pantalones de una amiga! Ni series como “El Ministerio del Tiempo” podrían haberlo imaginado mejor.
- Koldo García afirma tener grabaciones aún no publicadas que podrían dinamitar carreras políticas enteras.
- La comparecencia judicial decisiva estaba prevista para hoy lunes: si el juez acepta suspenderla por falta de documentación devuelta a la defensa, todo podría aplazarse días o semanas… y seguir alimentando titulares.
- El hartazgo entre viejos barones socialistas es tan grande que algunos empiezan a añorar los tiempos en que los escándalos cabían en una servilleta.