Lo dice él, que forma parte del Gabinete de Ministros como vicepresidente de la agenda social. Y lo hace porque está desesperado por arañar algún voto al independentismo en unas elecciones, las catalanas, que supondrán otra muesca en los sucesivos hundimientos autonómicos que viene sufriendo su formación.
Iglesias aseguraba este lunes 8 de febrero de 2021 en una entrevista al diario independentista ‘Ara‘ que «como vicepresidente del Gobierno español» tiene que reconocer que «no hay una situación de plena normalidad política y democrática cuando los líderes de los dos partidos que gobiernan Cataluña, uno está en prisión y otro en Bruselas», en referencia al golpista condenado Oriol Junqueras (ERC) y el fugado Carles Puigdemont (Junts).
Guiños al independentismo
Estas declaraciones las realizaba el secretario general de Podemos en un desesperado intento por hacer un guiño al independentismo que rocíe árnica sobre los comunes, que si nada lo remedia sufrirán un cacharrazo electoral apabullante.
Sus palabras son gravísimas porque contradicen a una compañera de Ejecutivo, Arancha González Laya, que respondió a su homólogo ruso Serguéi Lavrov comparando la situación del opositor Alexéi Navalni, víctima de envenenamientos, con la de los políticos golpistas del ‘procés’ catalán. «España es una de las 23 democracias plenas«, decía González Laya. Pero no para Iglesias.
El podemita ofrecía su entrevista a un diario independentista con el objetivo de arrimarse a ellos y abandonar esa ambigüedad que en modelo territorial siempre ha exhibido Podemos, aunque nunca han abandonado su simpatía a las reivindicaciones periféricas.
Se da la circunstancia que hace escasas fechas, el vicepresidente irritó a la memoria del exilio repúblicano, la que se supone que estaría más en consonancia con su partido, al comparar en una entrevista en laSexta al fugado Puigdemont, huido de la justicia española desde hace más de tres años, con los miles de exiliados durante el franquismo. Posteriormente tuvo que matizar su (penúltima) mamarrachada.
Pablo Iglesias equipara la fuga del golpista Puigdemont a la marcha al exilio de republicanos tras la Guerra Civil
El pasado 18 de enero de 2021, Pablo Iglesias hizo titulares en los grandes diarios al equiparar la la fuga del golpista Puigdemont, con la marcha al exilio de decenas de miles de republicanos españoles tras perder la guerra de 1936-39 con los nacionales del general Franco.
Y alguno, editorialmente, hasta se escandaliza, olvidando que el del moño es el mismo personaje que apoya al torturador Nicolás Maduro, alababa la perspicacia de los terroristas de ETA y usaba un teléfono móvil pagado por los ayatolas iraníes.
El líder de Podemos, propietario de un suntuoso chalet en la sierra madrileña, ha aprovechado este domingo una entrevista en La Sexta de sus amores para defender con vigor al fugado ex presidente de la Generalitat.
Puigdemont, instalado ahora en Bruselas, es un personaje reclamado por la justicia española tras participar en la declaración unilateral de independencia de Cataluña, que motivó el juicio por el que los líderes del procés fueron condenados a penas de cárcel por sedición.
«Puigdemont no está en Bruselas por haber robado dinero a nadie, sino por llevar sus ideas políticas hasta un extremo y por vías a mi juicio erróneas, y que no tienen por qué ser indiferentes al derecho».
