EL PRESIDENTE DEL GOBIERNO DE ESPAÑA NACIÓ EN AÑO BISIESTO IGUAL QUE CUANDO SE PRODUJO EL HUNDIMIENTO DEL MÍTICO BARCO

¿Sabes qué tienen en común Pedro Sánchez y el Titanic?

¿Sabes qué tienen en común Pedro Sánchez y el Titanic?

¡Miren que hay días en el calendario para nacer y el actual presidente del Gobierno de España tuvo que hacerlo un 29 de febrero de 1972, en año bisiesto!

Pedro Sánchez Pérez-Castejón nació en un día que, haciendo caso a un dicho muy popular que reza que año bisiesto, año siniestro, ha deparado noticias a lo largo de la Historia que no han sido precisamente para descorchar champán, sino más bien para echarse a llorar.

Según publica este 29 de febrero de 2020 el suplemento ‘La Otra Crónica’ (El Mundo) alrededor de este último día de febrero que solo se produce cada cuatro años se han tejido muchos mitos y supersticiones, incluso con connotaciones trágicas, pues un año bisiesto tuvo lugar el hundimiento del Titanic, en bisiesto también se inició la Guerra Civil Española y fueron asesinados personalidades políticas y del mundo de las artes y la música como Ghandi, Luther King, Kennedy o John Lennon.

Según un experto en nacidos en años bisiestos:

En la antigüedad existía la creencia de que los nacidos esta fecha tenían poderes sobrenaturales y aunque hoy está desterrada, sí que es cierto que algunas teorías de nueva espiritualidad los señalan como «seres especiales o elegidos», incluso existe una denominación específica para ellos, se les conoce como ‘los leapers'(del inglés bisiesto).

Se cree que tienen bastantes papeletas para convertirse en personas carismáticas o líderes argumentando además que la frustración que puede suponer a un niño celebrar su cumpleaños cada cuatro años hace que desarrolle un carácter más fuerte y voluntarioso.

¿EL CASO SÁNCHEZ ES UN EJEMPLO A TENER EN CUENTA?

Cierto es que las supersticiones y esas creencias sin base científica no suelen soportar el peso de la realidad, pero lo cierto es que en la trayectoria política de Pedro Sánchez hay algo de determinación y de empeño en lograr la meta que se proponga pese a las dificultades.

Y no solo nos referimos a alcanzar la Presidencia del Gobierno de España. Ya desde sus imberbes inicios en la esfera pública comenzó a sufrir un maleficio que una y otra vez acababa anulando.

En el año 2003, en las elecciones al Ayuntamiento de Madrid no pudo entrar como concejal de Trinidad Jiménez, pero en 2004 la salida de dos ediles del PSOE le permitieron ocupar un sillón en el salón de plenos de Cibeles.

En 2008, José Luis Rodríguez Zapatero, que repetía como candidato a revalidar como presidente del Gobierno, le incluía en la plancha electoral. Pero al igual que hacía cinco años, se volvió a quedar inicialmente fuera para ser incluido en 2009 tras correr la lista. Y le ocurría igual en 2011, con la candidatura de Alfredo Pérez Rubalcaba, donde se quedaba sin acta de parlamentario. En 2013 la recobraría.

En 2014, en las primarias para la secretaría general del PSOE, Pedro Sánchez tumbaría al gran favorito, el vasco Eduardo Madina.

LA GRAN PRUEBA DE FUEGO

Sin embargo, el gran reto para el actual presidente del Gobierno de España iba a llegar en 2016 cuando hundió al PSOE en la primera repetición electoral después de que no hubiese candidato capaz de formar gobierno tras la cita del 20 de diciembre de 2015. Ni el propio Sánchez, que se postuló ante el Rey Felipe VI tras la renuncia de Mariano Rajoy a la investidura, pudo lograrlo.

Tras dejar a los de Ferraz con 84 parlamentarios y negarse a un acuerdo con el PP dentro del PSOE empezaron a horadarle el terreno y todo parecía finiquitado a comienzos de octubre de 2016 cuando el Comité Federal del partido le mostró la puerta de salida.

Pero ocho meses después, en mayo de 2017, no solo concurrió para volver a ser elegido secretario general de los socialistas, sino que además ganó de forma aplastante a la que entonces parecía una incontestable Susana Díaz, presidenta de Andalucía y firme candidata del PSOE para postularse a la presidencia de España.

Y solo un año después, en 2018, moción de censura ganada a Mariano Rajoy y, pese a durarle solo unos meses el cargo de presidente del Gobierno, elecciones el 28 de abril de 2019 y su posterior repetición el 10 de noviembre de 2019 que le han vuelto a aupar, con indeseables apoyos, eso sí, a La Moncloa.

Veremos a ver si sigue empeñado en chocarse, con Podemos como copiloto, contra el iceberg del golpismo catalán y hundir a todo un país por su empeño en mandar a cualquier precio.

Te puede interesar

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA
Autor

Juan Velarde

Delegado de la filial de Periodista Digital en el Archipiélago, Canarias8. Actualmente es redactor en Madrid en Periodista Digital.

Lo más leído