El pecado ‘original’ son las mociones de censura que Ciudadanos urdió con el PSOE en Murcia y en Madrid.
Tras esa turbia maniobra, difícil de entender y además fracasada estrepitosamente, el PP no se fía.
Y en consecuencia, mejor ir solos a los comicios que mal acompañados, máxime cuando todo indica que los antiguos votantes de Cs se están pasando en bloque a las filas populares.
A día de hoy, Ciudadanos sobrevive gracias al poder institucional en algunas autonomías, como Andalucía o Castilla y León, pero sus expectativas electorales, a nivel nacional, son dramáticas.
Según la mayoría de las encuestas, de celebrarse ahora elecciones generales en España, el partido naranja apenas lograría un escaño: el de la propia Inés Arrimadas.
En consecuencia, Pablo Casado y Teodoro Garcia Egea han decidido eliminar hasta la posibilidad de hacer listas conjuntas entre el Partido Popular y Ciudadanos.
Descartada ya la opción concurrir juntos a las próximas autonómicas en Andalucía.
La propuesta de Arrimadas es considerada una maniobra para su propia supervivencia política, pues las encuestas anticipan un desplome de cara a unos próximos comicios andaluces.
El presidente andaluz, Juanma Moreno, ganaría las elecciones y lograría la mayoría absoluta con VOX.
