Si sus metas de ejercicio para el año son simplemente prevenir la mala salud y mantener su estado físico del día a día, es posible que se pregunte: ¿Cuánto ejercicio necesita hacer realmente? ¿Y caminar por la cuadra cuenta?, según recoge abcnet y comparte Paula Dumas para Periodista Digital.
Le preguntamos a cuatro expertos, y nos complace saber que es posible obtener resultados sin tener que trabajar durante horas todos los días.Conoce las pautas.
Espera, ¿qué significan realmente los términos de ejercicio?
Las actividades de «intensidad moderada» son aquellas que requieren un poco de esfuerzo, pero donde aún es posible conversar, como caminar a paso ligero, andar en bicicleta a velocidades moderadas, montar a caballo, nadar, jugar al tenis social o bailar.
Las actividades de «intensidad vigorosa» son aquellas que te hacen respirar más fuerte o que soplas y jadeas, dependiendo de tu estado físico. Incluyen aeróbic, ciclismo rápido, trote y muchos deportes competitivos.
Los ejercicios para fortalecer los músculos incluyen levantamiento de pesas, entrenamiento de resistencia, ejercicios de peso corporal (como flexiones, sentadillas y sentadillas), así como yoga y Pilates.
Las pautas nacionales de ejercicio de Australia (sí, el gobierno ha hecho el trabajo por nosotros) sugieren acumular 150 a 300 minutos de actividad física de «intensidad moderada», o 75 a 150 minutos de actividad física de «intensidad vigorosa», cada semana (o una combinación equivalente de ambos).
Eso es un mínimo absoluto de dos horas y media de actividad de intensidad moderada, o una hora y media de actividad de alta intensidad, por semana para mantenerse saludable. (Idealmente, estarías haciendo el doble de eso).
Las pautas también recomiendan realizar actividades de fortalecimiento muscular al menos dos días a la semana y minimizar la cantidad de tiempo que pasan sentados.
Estas pautas se aplican a adultos de 18 a 64 años; Existen diferentes pautas para otros grupos de edad.
Hacer que la caminata y otras actividades incidentales cuenten
Si ha estado evitando hacer ejercicio porque odia los deportes, la buena noticia es que hay una forma de actividad que le conviene.
Muchos pueden incorporarse a su rutina diaria, no se requiere membresía en un gimnasio.
Montar en bicicleta, hacer caminatas con amigos o usar un entrenador elíptico mientras ve la televisión son todas las opciones. Solo asegúrate de que los estás haciendo a un ritmo lo suficientemente rápido que requiera un poco de esfuerzo.
