Si el nombre es sugerente, el sabor es aún mejor. Pastel de seda francés, seda es la sensación que transmite cuando pruebas una cucharada.
Curiosamente aunque se llama ‘francés’ su origen no es Francia, parece surgió en América, pero se le puso este nombre al llevar un relleno con textura de mousse de chocolate, receta original francesa. En Periodista Digital te contamos el paso a paso.
Historia del pastel de seda francés
Aunque lleva la palabra ‘francés’ en su nombre, como antes decía, se sabe que de francés tiene poco. Surgió en los Estados Unidos en los años 50. Lo de añadir «francés» en la receta, posiblemente tenga que ver con la época, todo lo francés sonaba ‘chic’ y elegante.
En 1951, Betty Cooper, ganó el tercer premio de un concurso anual de cocina Pillsbury Bake-Off, con su receta de pastel de seda. Llevaba chocolate, pero ¿a qué se refería con seda francesa? Sonaba muy bien, y solo era eso, un nombre sofisticado para un postre totalmente estadounidense.
No existen datos sobre el porqué este pastel llegó a llamarse «pastel de seda francés», de hecho Betty Cooper la ganadora del concurso de cocina, a diferencia de otras participantes en concursos de la época no aparece en perfiles de libros de cocina de la época. Es difícil seguirle la pista.
Seguramente lo de seda viene por la textura del pastel que provoca esa descripción al comerlo. La receta resulta lujosa, y deliciosamente suave al paladar. Es posible el nombre que le dio Betty Cooper a su pastel fue aspiracional, tratando de evocar la moda francesa de Hermès y sus maravillosos pañuelos de seda.
Pastel de seda francés
Ingredientes
Para el relleno
- Nata líquida para montar – 250 ml
- Chocolate negro – 100 g
- Huevos – 4 unidades
- Azúcar -225 g
- Mantequilla – 120 g
Para la base
- Masa quebrada – 250 g (puede ser congelada o refrigerada)
- Nata montada – 200 g
Para decorar
- Chocolate negro rallado – 40 g (o virutas de chocolate)
Utensilios
- Batidora de varillas
Preparación
- En primer lugar, la nata que va con la base de la tarta, (ver ingredientes), la sacamos del brick y la depositamos en un recipiente, y a la nevera, al menos dos horas antes de hacer este pastel hasta que la necesitemos.
- Este postre requiere tener la base de masa quebrada lista para luego rellenar, puedes hacerla previamente el mismo día, en una media hora la tendrás lista.
- La masa quebrada la encuentras congelada o refrigerada.
- La masa congelada da muy buen resultado y es cómoda, ya que la tienes en el congelador y cuando te apetezca la usa. Hay que dejarla en la nevera la noche anterior. O si se te ha olvidado unas dos horas a temperatura ambiente para que se descongele.
- Para conseguir una base crujiente y nada blanda para nuestro pastel, e cuento un truco. Lo puedes usar cuando la receta lleve hojaldre o masa quebrada. Se trata de hornear en dos fases, no todo de golpe.
- Precalentar el horno a 160 grados. Colocar papel de horno sobre un molde, encima la placa de masa quebrada. Pincha con el tenedor.
- Coloca unos 250 g de garbanzos o alubias para que hagan peso sobre la masa quebrada. (esto se hace para que la masa no se hinche con el calor).
- Hornear a 180 grados 10 minutos.
- Transcurridos los 10 minutos, sacar la masa del horno, retirar el peso, los garbanzos o alubias que usaste, los puedes tener guardados te sirven para otra ocasión.
- Volver a introducir la masa quebrada en el horno sin peso, hornear 12-15 minutos o hasta que la masa esté un poco dorada. Sacar del horno y reservar. Cuando esté a temperatura ambiente, cubre con film de plástico y a la nevera.
- Llena una cacerola o una olla con agua y busca una ensaladera de cristal o metal que sea un poco más ancha y puedas colocar encima, es para hacer un ‘baño maría’ rápido y fácil.
- Enciende el fuego al mínimo no queremos que el agua hierva.
- Añade en la ensaladera los 4 huevos y el azúcar.
- Colocar la ensaladera sobre la olla con agua caliente, y comenzar a batir exactamente 10 minutos, pon un temporizador para que no se te pase el tiempo. Transcurridos los 10 minutos retira la ensaladera del calor.
- Mientras tanto derrite el chocolate, introduciendo en el microondas, 30 segundos al máximo, deja reposar otros 30 segundos y de nuevo añadir otros 30 segundos en el microondas.
- Deja reposar un minuto y revisa si está derretido, si aún le falta un poco. Programa el microondas unos 20 segundos al máximo y deja reposar. Haciéndolo el proceso con tandas de tiempo cortas evitamos que se nos queme.
- La mantequilla la necesitamos en pomada, la puedes introducir en el microondas durante 30 segundos también.
- Añadir la mitad de la mantequilla y el chocolate la mezcla de azúcar y huevos.
- Batir durante 1 minuto.
- Incorporar el resto de mantequilla y de chocolate, batir unos 7 minutos.
- Agregar los 250 g de nata que tenemos en la nevera, y mezclar con el chocolate hasta lograr una mezcla homogénea.
- Verter este relleno delicioso de chocolate sobre la base de masa quebrada, repartir bien usando una lengua de silicona.
- Cubrir con papel de aluminio y a la nevera durante toda la noche, el relleno con el frío se compactara. Requiere unas 8-10 horas de frío.
- Al día siguiente montar los otros 200 ml de nata que necesitamos para la cobertura de la tarta, en este caso montar hasta que nos forme picos. Dejar que repose en la nevera.
- Sacar la nata montada, y el pastel de la nevera, ahora el relleno estará más firme.
- Añadir la nata sobre el relleno de chocolate, estará muy ‘espumoso’, extender con una espátula.
- ¡Nos queda el toque final! Raya por encima chocolate negro y listo.
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