Este vídeo se puede rescatar y colocar abriendo cualquier periódico de tirada nacional en múltiples ocasiones desde que Pedro Sánchez es presidente del Gobierno. Porque no han sido pocas las veces en las que ha pactado con Bildu EH. Y no es la única ocasión en la que este vídeo nos ha servido para ilustrar la mentira.
Así que sí, este extracto que ahora queda del socialista entrevistado en la televisión navarra en 2015 resulta vergonzante. Sánchez se puso chulo, gallito, y hasta un poco matón con el entrevistador, y un tiempo después, tampoco mucho, ha terminado por dar el pésame a etarras, a acercar presos y demás necedades miserables, con tal de un apoyo por aquí y otro por allá.
Perdone, pero si le estoy diciendo que con Bildu no vamos a pactar, si quieres (pasa a tutear al entrevistador) lo digo 5 veces o 20 durante la entrevista, con Bildu no vamos a pactar. Con Bildu, se lo repito, no vamos a pactar. Si quiere se lo repito otra vez.
Pues hombre, señor Sánchez, igual sí nos lo tendría que repetir algunas veces más, porque por mucho que nos frotemos los ojos no nos lo terminamos de creer.
Fue en mayo de 2020, en pleno golpe del coronavirus en España, cuando Sánchez bajó por primera vez al barro de Otegi. Entonces pactó con la formación proetarra derogar la reforma laboral aprobada por el PP en 2012 y lo hizo público tras oficializarse la quinta prórroga del estado de alarma contra el coronavirus. Deleznable.
Muchas y grandes mentiras
No fueron una ni dos, sino muchísimas las mentiras del presidente del gobierno de coalición, en diciembre del 2019 publicábamos la 15 grandes mentiras de ‘doctor fraude’ –listado que ya tendremos que ir actualizando–, donde resaltaba una en particular: «Con Arnaldo Otegui, ni a la vuelta de la esquina».
Claro, Sánchez adecúa sus proclamas al contexto imperante. En 2016 apaleaba al entorno abertzale y ensalzaba la figura de Ernest Lluch, asesinado por los terroristas de ETA. Pero ahora, en 2019, no tiene problemas en permitir a los socialistas navarros que negocien los Presupuestos forales con Bildu, el partido del sanguinario y secuestrador Otegui.
Quien le iba a decir que en pleno 2020 tendría que negociar con los herederos de ETA hasta los Presupuestos Generales del Estado, con concesiones mediante:
«Si Bildu apoya esto es porque se llevará contrapartidas. Bildu es el heredero de ETA y algunos de los beneficios será conseguir una importante política de presos. Es decir, acercamientos. Ayer mismo después de que Otegi apoyase los Presupuestos, el Gobierno envió más cerca del País Vasco a los asesinos del matrimonio Jiménez-Becerril».
«Con Bildu no se acuerda nada»
Sánchez ya no fue tan matón como en 2015 cuando le preguntaron en rueda de prensa en 2019, sino que se hizo el ofendido:
El PS de Navarra y el PSOE español tienen la misma posición, y es que con Bildu no se acuerda nada.
Y de aquellas palabras, al final Sánchez terminó por dar el pésame, en la sede de la soberanía nacional, el Congreso, a un etarra suicidado. Ver para creer… Claro, que lo hizo a cambio de algo:
Me quiero referir al caso de Igor González Sola, el preso de la banda ETA [sic] que se suicidó la semana pasada en la cárcel donostiarra de Martutene. Y quiero antes de nada decir algo obvio: lamentar profundamente su muerte. Lo lamento.