Ha quedado…¡¡¡retratado!!!
El portavoz de Unidas Podemos en el Congreso de los Diputados, Pablo Echenique Robba, tiene una habilidad excepcional para acordarse de muchas cosas, pero también olvidar otras.
Sin embargo, la hemeroteca o, en este caso, la tuitoteca se vuelve contra el podemita cual poderoso boomerang.
El político morado, a pesar de que siempre ha criticado la celebración de manifestaciones, especialmente aquellas que iban en contra del Gobierno Sánchez-Iglesias, porque entendía que eran un más que posible foco de contagio del coronavirus, ahora es el primero que se apunta a las marchas feministas del próximo 8 de marzo de 2021.
Dice Echenique que él y los miembros de su partido acudirán allá donde se convoquen las manifestaciones feministas del 8-M:
Unidas Podemos acudirá a las manifestaciones del 8 de marzo si las hay. La decisión de convocarlas o no está en manos de las asociaciones feministas.
Asegura que, a pesar de la contundencia de la ministra de Sanidad, desaconsejando el 8-M en la calle con un inequívoco «no ha lugar», para Echenique no es más que una mera recomendación:
Las palabras de Carolina Darias son solo una recomendación.
Y subraya que el debate sobre lo maligno que es el 8-M se debe a que en 2020 se estigmatizó y se le culpó de ser el desencadenante de que los casos de contagio y de muertes se desbocasen:
No me atrevo a dar una recomendación en estos tiempos del coronavirus, pero es cierto que hace un año, cuando comenzó la pandemia, se estigmatizó al 8-M.
Sin embargo, las palabras y las intenciones actuales de Echenique chocan frontalmente con las vertidas el 18 de mayo de 2020 cuando criticaba que Ana Rosa Quintana tuviera en su espacio de Telecinco, ‘El Programa de Ana Rosa’, a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y ambas estuviesen de acuerdo en que los ciudadanos españoles salieran a la calle a protestar contra la falta de información del Gobierno Sánchez respecto a la evolución de la pandemia y a los cambios de criterio en cuanto al conteo de fallecidos.
Han muerto más de 25.000 compatriotas y en Alemania, Corea del Sur, Japón o Singapur ya ha habido rebrotes. Mientras tanto, Ana Rosa e Isabel Díaz Ayuso se dedican a alentar «manifestaciones» que nos ponen a todos en riesgo.
Si ocurre algo, será sobre vuestras conciencias. pic.twitter.com/Dw6vGJSVGA
— Pablo Echenique (@PabloEchenique) May 18, 2020
Lo curioso del caso es que esas palabras vertidas en el mes de mayo de 2020 por parte del portavoz podemita en el hemiciclo de la Carrera de San Jerónimo se cuidaba muy mucho de poner el foco sobre Sánchez, Iglesias o Illa a la hora de hablar sobre los fallecidos por el coronavirus en España.
No iban a ser precisamente las protestas en el barrio de Salamanca de Madrid, en otros lugares de la capital y en otras ciudades las que iban a seguir provocando un alto número de muertos, sino la falta de previsión del Gobierno socialcomunista y desoír las advertencias de la Unión Europea sobre los riesgos que entrañaba celebrar el 8-M.
