La pizza surgió en Italia en el siglo XIX, en la ciudad de Nápoles, aunque desde la época romana ya se preparaban unos panes planos llamados focaccia.
Pizza verde, una muy buena combinación hecha con masa de pizza, ricotta, espinacas baby, limones y un montón de cebollas. El pesto, mejor siempre casero, se extiende sobre la pizza.
Pizza Verde
Ingredientes
- 800 g de masa de pizza
- 250 g de ricotta
- 1 diente de ajo
- 200 g de espinacas
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
- 0,25 cucharaditas de sal
- Pimienta al gusto
- 1 limón
- 3 ramos de cebollas con el verde
- 1 manojo de menta
- 1 manojo de albahaca
- 0,5 cucharaditas de sal
- 1 dl de aceite de oliva virgen extra de primera cosecha
Preparación
1. Precalentar el horno a 240 grados. Extender la masa sobre un poco de harina y estirarla con el rodillo hasta formar un rectángulo de unos 30 × 40 cm. Colocarla en una bandeja de horno cubierta con papel de horno. Esparcir la mitad de la ricotta sobre la masa. Pelar el ajo, cortarlo en rodajas y poner la mitad de las espinacas. Rociarlo con el aceite y sazonar.
2. Hornear unos 30 minutos en la ranura más baja del horno.
3. Rallar la cáscara del limón, exprimir 2 cucharadas de jugo. Cortar las cebollas en diagonal en anillos, mezclarlas con el resto de las espinacas y esparcirlas en la pizza. Mezclar el resto de la ricotta y esparcirlas sobre la pizza. Echar jugo de limón y la cáscara sobre la pizza.
4. Hacer el Pesto: Triturar la menta, albahaca y sal con el aceite, esparcirlo sobre la pizza.