CONOCES LA RAZÓN DE MI RETRASO
Dilecta Pilar:
Conoces la razón de mi retraso en responderte. Paso de que me den más calabazas esperadas o recibir otro revés en el rostro.
Pues sí, el “finde” fue movido (debido a una música horrenda, infernal). El domingo aproveché para leer la revista “Humanizar”, el ejemplar de El País y escribir lo que te comenté en el anterior correo, casi dos folios. La verdad es que me quedó un texto precioso (¡qué va a decir su autor!; si él no lo defiende, ¿quién lo hará?, ¿el lector?; lo dudo). Te lo mandaré luego por otro cauce, para ver qué te parece (si quieres opinar al respecto, claro; que te no impongo nada; que conste en acta).
Te cuento un secreto (que, me temo, tendrás que compartir, velis nolis, con otras/os). Había salido de casa el domingo con los tres sobres bien guardados en uno de los bolsillos interiores de la americana que vestía (te parecerá mentira, pero aún hoy siguen ahí, donde los dejé). Dos iban vacíos, el de las elecciones municipales y el de las autonómicas. El de las europeas apoyaba a Josep Borrell y al resto de los miembros de la candidatura del PSOE. Pero ocurrió un hecho que me hizo variar de criterio: antes de entrar en el colegio electoral, me encontré y saludé al candidato a alcalde de Tudela por el PSOE, Ángel Sanz (no era yo, no) Alfaro, que salía de él. Bueno, pues, nada más acceder al citado, sito en el colegio de “La Anunciata”, me dirigí a donde estaban las papeletas y los sobres y metí en ellos sendas papeletas del PSOE. Fui a la mesa correspondiente y voté. Mutatis mutandis, me ha pasado lo que acabo de referirte alguna otra vez más.
A ver si los políticos elegidos por la ciudadanía se ponen cuanto antes manos a la obra y consiguen solucionan ese follón (acuerdan, que para eso están, los diversos gobiernos) y el resto de los problemas acuciantes que aquejan a nuestra sociedad.
Me gustaría mucho acudir a ambas, siempre que no tenga que ir a alguna cita o prueba médica comprometida: por ejemplo, el 21 de junio (me hacen una ecografía abdominal), el 3 de julio (cita con la nefróloga) y nuevos análisis el día 25 junio (la fecha ya está confirmada). Ya sabes; me pasa lo que a otro literato, José Hierro (salvando las grandes distancias existentes entre ambos, a su favor, claro), que se jactaba irónicamente de tener una mal salud de hierro. Mi hermano Eusebio, cuando se refiere al estado de salud de la gente, en general, suele iterar que el que no tiene un pero tiene un manzano. Yo soy consciente de que tengo, involuntariamente (acaso por herencia), una lata extensión de terreno repleta de frutales (la mayoría son peros o perales —pero estoy seguro de que podrían quedar curados o sanados casi del todo si al grupo lenitivo de las Pilares, que funciona estupendamente, se adhiriera otra más, imprescindible, la gallega, para alcanzar dicho logro o menester—).
Has hecho lo pertinente, entonces, al coronar mi encargo.
Otro (de tu amigo Otramotro).
Ángel Sáez García
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