A nivel internacional, el suceso más relevante en estos momentos, con el permiso de los principales conflictos bélicos, es la elección presidencial en los Estados Unidos; por eso, este martes 5 de noviembre, PERIODISTA DIGITAL transmite un programa especial de La Burbuja, para arrojar luz a un proceso muy reñido en el que hay incertidumbre acerca de quién puede ser el ganador y las consecuencias que desencadenará el resultado.
Con la participación de César Vidal, Colin Rivas, RafaPal, Elena Berberana, Rubén Tamboleo, Daniel Estulin y Alfonso Rojo, y la presentación y moderación de Josué Cárdenas, analizan todo lo que rodea a estos comicios.
Las elecciones más reñidas de la historia
Con cada elección en los Estados Unidos se vende que son las más importantes de la historia del país norteamericano. Lo cierto es que estos comicios que protagonizan Donald Trump, por el Partido Republicano, y Kamala Harris, por los Demócratas, serán las más cerradas que se recuerden. O al menos eso se desprende de las encuestas y estimaciones previas en las que no hay un claro favorito.
Estos comicios también pueden ser históricos porque una mujer puede convertirse por primera vez en presidente de la que todavía es la nación más potente en el mundo. El impacto de esta elección se sentirá en diversas partes del globo y puede cambiar el rumbo de conflictos como la invasión de Rusia a Ucrania o el de Israel contra Hamas (Gaza) y Hezbolá (Líbano), organizaciones financiadas por Irán.
Trump y Harris no solo protagonizan las elecciones más cerradas sino la más explosiva de la historia.
Los ataques personales han protagonizado gran parte de una carrera electoral que ha tenido de todo, desde cambio de candidatos (Harris sustituyendo al presidente Biden) hasta varios atentados contra la vida del líder republicano. El escenario político estadounidense se ha convertido en un verdadero drama en el que se enfrentan no solo dos personas, sino dos visiones de país completamente distintas.
Cómo se elige al presidente
En los Estados Unidos el sistema electoral es indirecto y el voto popular no decide al presidente; en su lugar, es el Colegio Electoral el que decanta la balanza. Cada Estado cuenta con uno y en total, suman 538 electores. Para alcanzar la presidencia, un candidato debe sumar al menos 270 votos electorales de los Colegios.
Cada región cuenta con un peso específico y proporcional a su población, pero que no siempre se corresponde con el total de los votos emitidos. Por esta razón, tanto Harris como Trump se concentran en los famosos ‘swing states’ (Estados oscilantes) regiones cuyo peso es mayor a la hora de contar los votos y que pueden decantarse indistintamente por cualquier candidato.
En 48 de los 50 Estados se implementa el sistema ‘winner-take-all’ (el ganador se queda con todo) en el cual el ganador del voto popular se queda con todos los votos del Colegio Electoral, siendo Maine y Nebraska la excepción, asignando dos votos bajo esta modalidad y el resto de forma proporcional a la votación popular.
El sistema electoral estadounidense permite que un candidato puedan ganar la votación popular pero aún así, no ser electo. Esto ocurrió en la elección de 2016 que enfrentaba a Donald Trump a otra mujer, Hillary Clinton. El candidato republicano fue el vencedor pese a que Clinton obtuvo casi tres millones de votos más.
Voto anticipado
Otro elemento clave en los comicios es el voto anticipado, bien por correo o en persona. En las elecciones pasadas, esta modalidad cobró mayor relevancia debido a la pandemia y más de 100 millones de personas se decantaron por esta modalidad.
Trump ha criticado esta opción, denunciando -sin pruebas- que el proceso fue manipulado y que por esta razón perdió las elecciones. En esta ocasión ha vuelto a criticar esta modalidad y ha pedido a sus partidarios que no voten de esta forma.
Los estados que deciden la elección
Como mencionamos arriba, los swing states son fundamentales para determinar al ganador de la contienda electoral. Son regiones de gran peso en el sistema y que no se consideran favorables ni a los demócratas ni a los republicanos y que pueden cambiar con cada elección.
En estos comicios, siete Estados son etiquetados así: Pensilvania, Georgia, Michigan, Wisconsin, Nevada, Arizona y Carolina del Norte. Juntos suman 93 votos electorales y son el principal campo de batalla de Harris y Trump, y donde los candidatos destinan sus mayores esfuerzos.
De ellos, el que más incertidumbre genera es Pensilvania donde Trump ganó en 2016 pero perdió en 2020, cuando se midió a Biden. Ambas victorias fue por un margen mínimo.
Resultados
Los primeros ‘exit polls’ o sondeos a boca de urna deberían difundirse a las 20:00 de la costa oeste y los resultados no oficiales podrían conocerse la misma noche. Por contra, los resultados oficiales pueden demorarse varios días según la cantidad de votos que se hayan emitido.
En las elecciones pasadas, la proyección del ganador se tardó hasta cuatro días ante lo reñido del resultado y la gran cantidad de voto por correo. En esta oportunidad podría volver a pasar lo mismo, y no conocerse el resultado.
