Pedro Sánchez sigue cumpliendo con Bildu, el partido de la izquierda abertzale donde militan o han militado históricos dirigentes de la antigua Batasuna o incluso de ETA.
El Gobierno de coalición de socialistas y podemitas ha decidido acercar desde Almería a Logroño al sanguinario terrorista Andoni Otegi Eraso, uno de los etarras que participaron en el asesinato del concejal de UPN José Javier Múgica Astibia, al que quemaron vivo.
Otegi cumple más de mil años de condena por el asesinato del edil de UPN y por el del agente de la Guardia Civil Cecilio Gallego Alaminos y la niña Silvia Martínez Santiago, en el atentado de Santa Pola.
La AVT reacciona
Desde la Asociación de las Víctimas de Terrorismo (AVT) se ha señalado que el Ejecutivo socialista se está dedicando a «vaciar» las cárceles del sur de España de presos de ETA.
«Todos los que no tuvieron ningún tipo de humanidad con sus familiares, hasta el punto de asesinarles a sangre fría, hoy el Gobierno de España les complace con el humanitario gesto de poder cumplir sus condenas cerca de sus familiares»
Otros presos beneficiados
Para conseguir su apoyo de cara a los presupuestos, Sánchez sigue satisfaciendo todos los deseos expresos de Bildu.
Otro que se beneficiará del acercamiento es el histórico dirigente de ETA Antonio Troitiño Arranz.
El militante del ‘comando Madrid‘ será acercado de Estremera a Soria. Acumula una condena de miles de años por su participación en múltiples atentados que acabaron la vida de 22 personas. El más mortífero fue el de la Plaza de la República Dominicana donde asesinaron a 12 guardias civiles.
Fue puesto en libertad en 2011, lo que aprovechó para fugarse a Reino Unido.
Aparte de Andoni Otegi y el mencionado Troitiño, también han sido acercados Aitzol Maurtúa Eguren, Mikel Arrieta Llopis, Víctor Franco Martínez y Agustín Almaraz.
Récord de acercamientos
Incluso sin contar con estos últimos, en agosto Sánchez y Marlaska ya se podían anotar este funesto récord.
Debería ser la lista de la vergüenza de Pedro Sánchez. Un Gobierno que, con el presidente socialista y su titular de Interior, Fernando Grande-Marlaska, y la complicidad de sus socios de Podemos, ha mejorado la vida de 71 presos de ETA.
Estos etarras han sido beneficiados con acercamientos al País Vasco o con disminución de sus grados penitenciarios.
El Colectivo de Víctimas del Terrorismo (COVITE) y la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) lleva meses alertando del fin de la política de dispersión de presos etarras y demandando explicaciones a Grande-Marlaska.
“Desde junio de 2018 hasta ahora, todos los traslados de presos de ETA por política penitenciaria se habían producido a cárceles que no se encontraban en el País Vasco, sino a prisiones de otras comunidades”,
