Mónica Gastronómica

Mónica Gutiérrez-Aller García

PIÙ di PRIMA, la DOLCE VITA de la ALTA Cocina ITALIANA

PIÙ di PRIMA, la DOLCE VITA de la ALTA Cocina ITALIANA

PIÙ DI PRIMA marcó una época gastronómica allá por los comienzos de los 2000, un restaurante italiano en el que igual te encontrabas a un famoso del papel couché que al crítico gastro más aclamado del momento.

Tras el mítico local de la calle Hortaleza y un breve paso en otra localización, PIÙ DI PRIMA se instala definitivamente en el icónico Paseo del Pintor Rosales, en un espectacular local de aire claramente cosmopolita en cuyo hall recibe la mismísima Sophia Loren con los colores italianos subidos.

PIÙ DI PRIMA sabe Italia, al Véneto, región de la que procede Stefano Franzin, chef y socio de este restaurante de Alta Cocina Italiana. Franzin es uno de esos cocineros vocacionales, -poseedor de un envidiable curriculum internacional- que sabe transmitir su pasión gastronómica no sólo a su equipo de cocina, sino también a los clientes de esta casa italiana.

De sus fogones salen platos únicos, de esos que ya estás pensando en repetir antes de terminártelo, como sus originales Raviolone (y no ravioli, -por su tamaño-), con crema de parmigiano, yema de huevo de corral, espinaca y trufa rallada directamente en mesa. Una receta del siglo XV que era la favorita de los nobles italianos por su exquisitez presente en las bodas de la alta sociedad de la época.

Imprescindible mencionar que la pasta en PIÙ DI PRIMA no solamente es pasta fresca del día, sino que se  elabora al momento de ser consumida de forma completamente artesanal y con mimo.

Sin olvidar las deliciosas influencias de la “nonna” napolitana de Stefano, el Piamonte, Abruzo y La Toscana también están presentes en los risotto típicos del norte de Italia, elaborados con arroz italiano y terminados con las codiciadas y cotizadas trufas del país alpino, negra o blanca en función de la temporalidad de este hongo. A destacar el risotto al champagne con trufa blanca o el risotto a la tinta de sepia con carabinero. No en vano el risotto de Franzin ha sido reconocido como uno de los cinco mejores risottos del mundo entre un total de 101 restaurantes!.

Un espléndido servicio de sala encabezado por Teresa Santillana, directora y pieza imprescindible de este significativo restaurante, se encargan de proponernos apetecibles sugerencias del día en función del mercado y convincentes platos como el vitello tonnato Più di Prima, la burrata della Puglia, o las berenjenas alla parmigiana, junto a una  formidable Milanesa en el apartado de carnes, cocinada al momento y perfecta para compartir por su tamaño.

Sin duda en PIÙ DI PRIMA hay que dejar sitio para los postres, todos ellos caseros, en los que el chef se luce con un tiramisú clásico veneciano con gotas de chocolate y amaretto, strudel de manzana (influencia del sur del Tirol) o el semifrío de mojito en tres texturas.

El país de la bota inspira también la carta de vinos con más de 40 referencias de diferentes regiones italianas, alguna concesión al mercado nacional y una sugerente carta de cocktails completan la experiencia gastronómica con el inconfundible sello de la casa.

La interiorista Laura Cuevas ha superado con nota el reto que suponía decorar un restaurante con semejante trayectoria, creando un espacio en el que la armonía entre la tradición y lo contemporáneo nos traslada a un lugar atemporal, cálido y confortable inundado por la luz natural que entra a través de los enormes ventanales a pie de calle, ventanales que también iluminan una planta baja concebida tanto par un divertido afterwork como para ofrecer privacidad a los clientes que quieren pasar desapercibidos en una atmósfera british con muebles de diseño propio.

Sólo me resta decir: Bravíssimo!!

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA
Autor

M. Gutiérrez-Aller

Mónica Gutiérrez-Aller, apasionada por la gastronomía, por la buena mesa, por el disfrute de los aromas, sabores y colores de los platos

M. Gutiérrez-Aller

Mónica Gutiérrez-Aller, mónica gastronómica bien podría llamarse mónica gastroMÓNIca, y con ese juego de palabras es fácil adivinar mi pasión por la gastronomía, por la buena mesa, por el disfrute de los aromas, sabores y colores de los platos.
Soy de esas personas que se sientan a la mesa para estar feliz, para compartir charla y mantel, para aprovechar los instantes que nos da la vida y simplemente dejarse llevar por las recetas elaboradas por los cocineros, pasteleros, guisanderas y chefs con todo su cariño

Lo más leído