¿IRIS? ¡DE GUSTOS SENCILLOS!
Comprendo que tú no entiendas
Cómo a Iris puedo amar tanto.
Tal vez veo en ella el manto
Que tú admiras en las tiendas
Religiosas. Recomiendas
Que me fije en sus bordados,
Primorosos y dorados.
¿Exige Iris un diamante
A quien quiera ser su amante?
No, sonetos moderados.
Ángel Sáez García