YO HABITO EN LA “DE MIL Y UN RUIDOS” CASA
Si buscas una casa con maullidos
Que te desvelen, sí, de madrugada,
Y a una reforma esté siempre abonada,
Te recomiendo la “de mil y un ruidos”.
Si te interesa un piso con ladridos
(A ti, Iris, me dirijo, musa amada),
Te sentirás mujer afortunada
En el mío, epicentro de alaridos.
Así como el palomo a la paloma
Atrae con su arrullo, su zureo,
Contigo hago lo propio si el bureo,
Divertimento que uso, nadie doma
Como quien firma abajo, este navarro
Que no tiene por ti los pies de barro.
Ángel Sáez García