UNA PUTA SEMEJO ANTE EL ESPEJO
DESPUÉS DE MAQUILLARME HASTA EL CONEJO
EN LAS CARNESTOLENDAS, EL ANTRUEJO
No diré por sus actos o sus obras
Que ese zorrón de enfrente sea malo,
Pero a sus ojos miro y un regalo
No me parece y sí o basura o sobras.
No me atrevo a espetarle “huelgas, sobras”,
Ni tampoco a enseñarle enhiesto el falo,
Mi dedo corazón, mientras inhalo
Pegamento y pregunto ¿cuánto cobras?
¿Por qué te has disfrazado tú de puta?,
Inquiero, mientras miro en el espejo,
A la que guiño el ojo y no se inmuta.
Ríete de mis límites. No dejo
De una contradictoria ser en ruta
Que vende en el antruejo su conejo.
Ángel Sáez García