Trotsky y Stalin en Podemos
Llueven sobre nosotros las frases de otro tiempo. Éramos jóvenes y discutíamos sobre lo que había que hacer cuando cayera Franco. Que no cayó nunca. Se murió por sí solo, sometido, eso sí, a ensañamiento curativo, sin que nosotros hubiéramos llegado a resolver los dilemas revolucionarios que nos entretenían a la vuelta de las manifestaciones