El periodista de investigación Juan Luis Galiacho repasa en una profunda entrevista a PD toda su trayectoria, un recorrido largo y profuso en el que ha indagado los tejemanejes de los personajes más relevantes de la sociedad española y los vetos o los intentos de censura que ha tenido. Y es que contar y cantar que tal o cual político se lo estaba llevando crudo no es plato de buen gusto para quien sale en los papeles (o en las ondas) y no muy favorecido, precisamente.
P: Cuando hablábamos de periodismo de investigación con Antonio Rubio, veíamos como este tipo de periodismo genera un nivel de enemigos bastante considerable. En su caso, me imagino, que debe tener unos cuantos
R: También. La verdad es que no es un periodismo agradecido, es agradecido desde el punto de vista personal, pero bueno, de cara a lo que pueden ser amigos, más que amigos tienes enemigos y, sobre todo, enemigos en los juzgados, que es donde ellos intentan siempre ir a por ti. Yo, como profesor en la universidad, siempre le digo a los chicos que este no es un periodismo en el que te inviten al palco del Bernabeú, que tengas amigos entre los empresarios, etcétera; lo único que pasa es que nosotros, los periodistas de investigación, somos maratonianos, somos corredores de fondo; y el que resiste al final gana, y eso te da una gran satisfacción cuando ves que, después de mucho pasar por el desierto, al final te llega la recompensa y eso, en el fondo, es una de las mayores alegrías.
P: Un caso que llama mucho la atención es el de los fondos reservados. Aunque el diario El Mundo tenía su equipo de investigación, que eran Antonio Rubio y Manuel Cerdán, en esta ocasión fue de las pocas veces que el nombre que salió encima de toda la información de El Mundo fue el suyo.
R: Eso fue a través del programa de Encarna en la COPE, ‘Directamente Encarna’ donde yo trabajaba. Fue cuando comenzamos con la investigación sobre el patrimonio de Rafael Vera y lo hicimos con muchísimas presiones. Entonces Vera era el gran fontanero, el que llevaba, prácticamente, toda la basura del Estado y entonces era muy costoso investigarle, fundamentalmente porque tenía prácticamente cogidos a todo el mundo. Y en la COPE intentó parar el tema justo el día que fuimos a hacer ese programa. El director general de la Cadena COPE bajó a los estudios para decirle a Encarna Sánchez que parara el programa, Encarna le dijo «¿Me estás censurando un programa?, No, hombre, Encarna, pero tú sabes lo bien que nos ha tratado Vera«, Me dijo «¿tienes las pruebas, Galiacho?» y yo digo «Sí, sí», «Pues para adelante al estudio», y realizamos el programa a pesar del veto inicial que se nos quiso hacer. Encarna era una mujer de armas tomar y fue para adelante. Aquello ocasionó una convulsión dentro de la COPE, estaban todos los ‘popes’, estaba García, estaba Antonio Herrero, Luis Herrero; estaban todos y todo era una expectación a ver lo que pasaba.
Y eso es como ‘Historias de la Radio’ porque estando en el programa entró Rafael Vera que quería intervenir e intervino, y Encarna me dijo, «con tranquilidad porque estamos hablando con una persona que se había sentado con los principales dirigentes de ETA», la persona más fría que yo he conocido en mi vida que es Rafael Vera, cínica además. Pero como te digo, como si fueran ‘Historias de la radio’, en ese momento hay una llamada, no sabíamos quien era, y dice Encarna «Bueno, que pase a antena y era, precisamente, la sobrina del suegro de Vera, la prima de su mujer, que venia a decir que todo lo que estaba diciendo Vera era mentira sobre la fortuna de su suegro, el famoso ferretero, que era un hombre que no tenía ninguna fortuna y tal».
Y entonces, claro, dejó totalmente fuera de juego a Rafael Vera y eso fue el gran éxito y a partir de entonces, tuvimos muchas presiones de Vera, querellas…
P: Salvo en una entrevista en ‘Interviú’ donde Vera menciona que os ha demandado a Encarna Sánchez y a ti, quitando esta excepción, no aparece ninguna referencia en la prensa que siguiera el caso, antes de que se publique ya a nivel de El Mundo. Llama la atención que en los años 1993-94, más aún con la discusión en antena, nadie lo sacara en la prensa, ni en el ABC, ni en El Mundo; aunque sólo fuera para decir «el señor Vera ha demandado a dos periodistas, Encarna Sánchez y a Juan Luis Galiacho».
R: El problema fundamental es que Vera tenía prácticamente cogidos a todos los periodistas y a todo el mundo. Era el que había negociado, incluso era amigo, entonces, o por lo Pedrojota menos conocido de Ramírez, y entonces tenía su poder. Nadie se atrevía con él. Nosotros fuimos los que abrimos la brecha, a partir de eso, cuando ya se abre el melón, ya intervino El Mundo, que estaba sacando también el tema de los fondos reservados, de Roldán, etcétera; y entonces, con Antonio y con Manolo, que son dos grandes periodistas, aparte de amigos, nos pusimos a trabajar.
Yo me entero de lo de Vera de una manera que permite comprobar lo que son las fuentes y cómo te puedes enterar de una noticia. En un partido de fútbol, en el descanso, no se me olvidará nunca, jugaba mi equipo, el Albacete, con el Racing de Santader; entonces estaban los dos en Primera, y me dicen «¿Te has enterado del patrimonio que tiene Rafael Vera?» Porque la finca estaba en Albacete, se llama ‘El relumbrar’ y era una finca que estaba en Alpera. «No, no». Y a partir de ese chivatazo que me dieron en Albacete, justo en el partido, empecé a investigar, a tirar del hilo, fui a los registros, me personé en la finca de Alpera; fui investigando, que es lo que te decía con anterioridad; es decir, que todos al final somos maratonianos hasta llegar a nuestro destino final, y conseguimos tener la documentación necesaria para poder implicar a Rafael Vera en uno de los grandes escándalos de la democracia.
P: ¿Siempre decidió dedicarse al periodismo de investigación o antes tocó otros palos?
R: Yo soy licenciado en económicas, soy doctor en Ciencias de la Información, pero soy licenciado en Económicas. Yo entré en el periodismo por ser, más que periodista, economista, y entré en el diario El País en lo que eran las páginas de economía.
Estaba entonces Belén Cebrián y estaba Rosa Cullell que hoy es un alto cargo de La Caixa y hubiera sido del Liceu (implicada en el caso Palau). Eran las jefas del papel salmón. Entré allí, empecé a hacer mis pinitos como becario. Al final, rápidamente, se forma la revista Tribuna, con Julián Lago y me llevan allí y, a partir de entonces entro en la sección de economía con Luis Díaz Güell, que era entonces mi jefe, que es hoy el director de comunicación de Iberia; y ahí se forma un grandísimo equipo de verdaderos periodistas, Sebastián Moreno, estaba Jesús Maraña o Díaz Herrera; bueno, todo el mundo estaba allí, todos al lado de Julián Lago.
Como todos los grandes escándalos de los años 90 fueron económicos, y como yo estaba muy puesto en leer los balances, sabía intuir donde estaba todo el tema económico y los grandes escándalos, Kio, Juan Guerra, Filesa; estamos hablando de financiaciones. La formación económica fue lo que me valió para convertirme en periodista de investigación.
P: ¿Estaba en Tribuna cuando salió Julián Lago de la dirección?
R: No, yo me fui. Es que entonces a los periodistas nos fichaban como a los grandes jugadores de fútbol, y parece que yo era bueno, y entonces me iban fichando. Me iban subiendo el sueldo y me iban fichando, me fichaban a golpe de talón; es que es otro momento del periodismo, pero nos fichaban así.
Al poco de crearse ‘Tribuna’ ya me hicieron una oferta para irme, entonces se creó otro periódico económico que se llamaba la ‘Gaceta de los Negocios’ del Grupo Zeta.
P: ¿Con Javier de la Rosa?
R: Si, si, correcto, es verdad, con el Grupo Zeta lo montó. Era un periódico de otro grupo Zeta con Martínez Soler de director, también empezaron a fichar a todos y como en la gran aventura estaba Javier de la Rosa y me volvieron a fichar y yo me fui a ‘Panorama’, que también era del Grupo Zeta con Manolo Romero, y ya me puse a sacar temas de Juan Guerra, etcétera. Y rápidamente también, me volvieron a fichar, y me fui a la revista ‘Época’ con Jaime Campmany; iba cambiando.
P: Por poner algunos de los que han sido jefes o responsables de los programas en lo que colaboraba, mencionaba antes Encarna Sánchez, que es un nombre que en los últimos diez años, porque creo que todavía, sigue protagonizando programas de los llamados del corazón, dando una perspectiva siempre muy negativa de ella. Considero muy interesante que también quede que su programa no era sólo hablar de la Pantoja y otras personas del famoseo.
R: Yo creo que tuve la mala suerte de que Encarna muriera justo cuando estábamos, como se dice, en la rampa de lanzamiento. Me acuerdo que cuando íbamos al Congreso los diputados que estaban casi se ponían de rodillas porque el poder que tenía entonces Encarna Sánchez era brutal en su programa.
P: ¿Y había una parte de investigación además de políticos y de gente importante?
R: Yo he trabajado, y tengo que decirlo muy alto y claro, muy bien con Encarna Sánchez, que era una mujer de armas tomar, pero una mujer que sólo podía tener dos o tres flecos. Eran Jesús Gil, por el tema de la propiedad de ‘La Gaviota’ de Marbella, porque le dio esos terrenos para hacerle el chalet dónde quería vivir con Isabel Pantoja; Barrionuevo, porque me parece que tenía unos familiares que había metido en la Guardia Civil; pero dos, tres flecos, nada más. Para el periodismo de investigación donde el presentador o el propietario de ese programa, porque Encarna era propietaria de su programa a través de su productora, pues es importantísimo que sólo haya tres flecos. Es decir, que tienes cantidad de cosas donde poder trabajar y donde poder investigar; y, poco a poco, íbamos creando un programa muy importante de investigación que comenzaba cada semana con un tema pero, luego ya, eran varios. Y, sobre todo, una cosa muy importante, yo creo que abrimos, fundamentalmente, la investigación de temas sociales que eso es lo que le llegaba al pueblo; es decir, la señora que tenía el problema, pues investigábamos qué pasaba.
Era la investigación que yo creo que se ha perdido, que es la investigación del periodismo social.
P: Otro de los grandes de la radio con el que también ha coincidido es José María García, de hecho creo que con su etapa en Onda Cero comenzó la guerra con Florentino Pérez, donde usted tiene una participación muy fuerte en alguno de los casos de las torres.
R: Sí, sí, correcto. Yo hice el último programa con García en antena, porque fue precisamente el tema de Florentino Pérez que, a través de su mano derecha, de Julio Merino, que también lo conocía de la COPE, también había hecho cosas con la COPE.
P: ¿Julio Merino, el que fue director de El Imparcial? No conocía su vinculación de García
R: Sí, sí. Era la mano derecha de García en los equipos, tanto en la COPE como en Onda Cero, sí.
P: Lo desconocía totalmente, después de El Heraldo y El Imparcial le había perdido la pista a este periodista, ¿estuvo con García?
R: Estuvo con García, sí, sí. Era su mano derecha, era un poco el que le coordinaba todos los equipos y tal y, bueno, yo lo conocí en la COPE y luego en Onda Cero seguí colaborando con ellos. Le dije a Merino que se equivocó no valorando la fuerza que tenía Florentino Pérez, se creía que podía, porque ya habíamos hecho investigaciones de Lorenzo Sanz, el otro presidente del Real Madrid, y habían llegado a un pacto con Lorenzo Sanz, se había bajado los pantalones. Pero con Florentino, yo creo, que es el personaje más peligroso, entre comillas, con los que te puedes enfrentar hoy en día. Sus tentáculos y su fuerza es brutal. Y lamento el fallecimiento de su mujer, de Pitina, a la cuál yo le dedico un capítulo, y considero que era la persona que, de verdad, dirigía a Florentino Pérez.
‘Mujeres del gran poder’, ahí hay un capítulo dedicado a Pitina, María Ángeles Sandoval, y donde narro un poco la fuerza y la importancia que tenía esta mujer, sobre todo, en la vida de Florentino Pérez.
P: García había contado en alguna ocasión que Florentino Pérez había intentado comprarlo, lo contó en varios programas a través de Manuel García Durán. En su caso, ese tipo de prácticas, ¿le consta que lo intentara para frenar las investigaciones?
R: Florentino levanta un teléfono y te para cualquier investigación. Yo creo que es el personaje con más fuerza dentro del panorama español. Creo que Florentino, incluso, en uno de los cursos de verano que organizó la Universidad Rey Juan Carlos, me decía una alta directora de un programa de televisión con muchísimos años que solamente había tenido censura con Florentino Pérez. Y es uno de los programas míticos dentro de la televisión española, y la directora me comentaba que había sacado todos los temas menos los de Florentino Pérez porque se los paralizaban inmediatamente.
P: En 2007 José María García anunció que iba a volver a la televisión, se especuló que iba a ser Intereconomía, y el único nombre que se dio, que iba a estar con José María García era Juan Luis Galiacho, que iba a hacer una sección de investigación sobre ricos y de dónde habían sacado su dinero. Este programa nunca apareció y nos quedamos todos con las ganas de verlo. Como era el único nombre que se dio. Le pregunto ¿Qué sabe de aquel proyecto?
R: Se lo cuento, es muy fácil. Cuando García se va lo que quiere hacer es investigación, ya estaba cansado de lo que era el deporte en sí, tampoco iba a dejar fuera el deporte, pero lo que quería era centrarse en el tema de investigación. Yo había trabajado con él, habíamos hecho bastantes cosas, esto de Florentino, también acerca del presidente de la Liga de Fútbol Profesional, Jesús Samper o de Lorenzo Sanz.
Entonces lo que quería era tener un equipo de investigación y, de hecho, ese verano famoso que tú comentas, pues si que se realizaron algunas llamadas. Estaba todo preparado pero ¿cuál fue el problema? Que ocurrieron dos cosas. Una que García lo que quería era tener una responsabilidad civil detrás, muy lógico para los periodistas; es decir, que la cadena te avale un seguro de responsabilidad civil, que es muy importante, sobre todo, cuando estás tratando temas tan complicados como los que íbamos a tratar en investigación. Y dos, otra de las cosas por las que no salió adelante el proyecto fue por la oposición familiar de García, tanto de su mujer como de sus hijos, que le habían apoyado tanto en los momentos difíciles cuando tuvo ese problema de la enfermedad y entonces le dijeron que no era cuestión de volverse a estar metido en la pomada, ahí en esos horarios, teniendo, otra vez, esos enemigos, y que vivían bien y que se olvidara.
Pero bueno, fundamentalmente el tema de la responsabilidad civil, que es muy importante, un aval de la cadena sobre los periodistas, sobre todo porque tratamos estos temas. Yo, por ejemplo, estoy ahora, por decirlo así, freelance, tengo bastante problemas desde el punto de vista de que si me cae una querella me tengo que ir yo con mi patrimonio.
P: Si ahora interviene en algún programa, ya sea en Cuatro, Antena 3, dice algo, la cadena no responde de nada…
R: [La cadena] no responde de nada, entonces te toca a ti responder por lo que cuentas.
P: A los periodistas suele recomendárseles que no critiquen a los magnates de la comunicación para no cerrarse puertas. En su caso, no parece que le importase, porque publicó cosas contra grandes magnates de la prensa. Estoy pensando en Jesús Polanco. Él intento medidas judiciales contra usted y contra Jaime Campmany, por alguna historia de Hacienda.
R: Si, incluso nos llamaron a declarar a los juzgados de Plaza Castilla por una información que dimos acerca de unos informes fiscales. Era de Hacienda, la información fiscal famosa y que luego se dijo que la había filtrado Ruiz Mateos y que había comprado a inspectores de Hacienda y que había filtrado todo el tema. A mi me tentaron en un interrogatorio para que revelara las fuentes.
Y no solamente el tema de Polanco, el tema del Santander, de Botín, que también lo sacamos, tocar el poder; por eso te quiero decir que si que tocábamos el poder. Por eso el periodismo de investigación normalmente, a pesar de que no tengamos ningún tipo de cargo, y está Antonio Bruno que tiene un cargo genérico y tal en el periódico, estamos haciendo nuestras cosas pero si que hay que tener un contacto totalmente directo con la dirección porque, en el fondo, estas tocando lo más conflictivo y lo más problemático.
P: Es la parte, digamos, que pueda dar el mejor titular pero también los mayores problemas
R: Efectivamente, es un tema que tienen que tomar decisiones los propietarios de los medios o los directores de los medios, no puedes estar con un redactor, porque en el fondo estás tocando el poder económico como puede ser Botín, el poder mediático como en su día era Polanco; entonces, son decisiones que claro, las investigaciones te tienen que dar el placer, y sobre todo la continuación y cómo se desarrollan a través de un contacto directo con el director o el editor.
P: Hay figuras que se han movido también por finanzas y por medios y que han tenido auges y caídas, me gustaría saber tu opinión sobre alguno de ellos, por ejemplo Mario Conde, que al poco de salir de prisión informaste ya de que podía invertir en Intereconomía, es cierto que cuando él estuvo por aquí, negó ser accionista de intereconomía, pero también es cierto que todo el mundo, la vinculación, aquellos que ven la televisión no creo que haya nadie que lo discuta. Hace poco publicó en ‘El Extraconfidencial’ que Banesto podía ayudar a Intereconomía de Conde y Ariza. Hablando de esta interesante figura. ¿Cómo ve la evolución de auge-caída y algo, menos habitual, que es el resurgimiento, porque después de ser el hombre más apestado en un momento dado, parece que vuelve a tener sus incondicionales?
R: Eso es una cosa que me preocupa, sobre todo que este tipo o estos personajes luego puedan tener una recompensa; sobre todo cuando sabemos quienes hemos investigado a Mario Conde lo que ha hecho, que ha sido llevarse el dinero y no devolverlo, esos 8.000 millones que le pusieron de sentencia, bueno, no habrá devuelto ni la mitad. Sin embargo las propiedades, lo supo hacer muy bien, a través de sociedades radicadas en paraísos fiscales, en Holanda, etcétera; y logró sacar muchísimas cosas, con la ayuda fundamental de su mujer ya fallecida, de Lourdes Arroyo.
Hoy Mario Conde tiene su dinero, tiene sus inversiones, y por eso hoy es un grande magnate del tema de las parafarmacias, donde también en su día estuvo involucrado, tiene varias empresas de aloe-vera, ha comprado propiedades en Canarias…
P: Hay muchas amistades, leí que lo del Pazo este de Galicia, era de la familia Baltar (familia que lidera al PP de Ourense).
R: Sí, de Baltar, si, si. Bueno y a su mujer actual también la conozco porque ella es profesora de la Universidad Rey Juan Carlos, donde yo también imparto clases y también la conocía. Pero Mario Conde es un personaje muy aburrido en su vida, muy aburrido, de los que se acuestan muy temprano, siempre ahí metido, no es nada divertido; no es un personaje que sea atrayente desde el punto de vista… O sea es atrayente por su mensaje, pero es un mensaje que ya lo conocemos quienes lo hemos investigado.
«EL CASO TELECINCO ACABÓ EN NADA»
P: Otro de quien también ha escrito fue Miguel Durán, quien también tuvo un auge y una caída.
R: Ese también es otro personaje curioso y singular. Yo acabo de sacar un libro, bueno hace un par de años, que se llamaba ‘Del cielo al abismo’, precisamente sobre Miguel Durán, un personaje que tocó el mayor poder con la ONCE cuando la ONCE tuvo el apoyo del PSOE y le servía de bisagra con Matilde Fernández. Estamos hablando de una organización que, entonces, le funcionaba muy bien lo que era el cupón, y eso quería decir que tenía ‘cash’ fresco y contante todos los días, ¿Qué empresa tenía ese dinero? Nadie lo conocía, nadie más que la ONCE: Entonces le sirvió muy bien al PSOE entonces, para hacer bastantes cosas, sobre todo con el apoyo de la Ministra de Asuntos Sociales, Matilde Fernández, y luego, se metió en los medios televisivos. Que no te puedes imaginar como un ciego sea presidente de una televisión, vamos, eso no tiene la mayor lógica; y lo fue y luego Garzón intentó ir a por él, pero sobre todo para coger a Berlusconi, si no, ni va, porque eran las obsesiones de Garzón.
P: El ‘caso Telecinco’ que, al final, acabó en nada
R: En nada, porque, precisamente, la instrucción fue muy mala, y entonces quedó en eso, a pesar de que la sentencia dice que se cometieron delitos, de mover las acciones a través de todos los testaferros de Badajoz que metían, Mendrano, etcétera.
P: De estos personajes, los dos coinciden en que consideraron que sus caídas fueron más bien conspiraciones
R: Es que eran conspiradores, los dos.
P: Según Durán fue una conspiración interna de la ONCE contra él, y mientras que Mario Conde dice que fue una conspiración de PP y PSOE ¿Usted lo ve como tal?
R: Si, bueno, es que ellos han sido conspiradores. Mario Conde ha sido un conspirador que, incluso, quiso penetrar en la Casa Real, y si no es por Sabino Fernández Campos, hubiera penetrado perfectamente, a través de pagarle las facturas al padre del Rey, a don Juan en la clínica Navarra; es decir, eran conspiradores totalmente. Y Durán incluso, más aún, porque Durán tenía incluso un servicio de policía que había montado (…) y montó una empresa de seguridad.
P: Cuando se cambia un Gobierno también se hace frente a los brujos visitadores de cada gobierno, la supuestas gentes que, por amistades con el gobernante de turno, consigue mejores negocios o no. No sé si a veces hay una tendencia quizá a novelar y ver misterios donde no los hay. ¿Exageramos esta vez si decimos que, efectivamente, hay un grupo de gente que, alrededor de los gobiernos, encuentra siempre negocio?
R: Yo creo que siempre en torno a los gobiernos hay gente que está ahí para hacer negocio y que los gobiernos, incluso, quieren. Ya no solamente PSOE o PP, todos. Vamos está claro que entorno hay. Existe un grupo que siempre está. Incluso cambian de chaqueta con muchísima frecuencia. Los mismo que estaban con el PSOE pueden estar con el PP y viceversa.
P: No es una cuestión de ideología
R: No, aquí la ideología está en la tarjeta de crédito y nada más. La única ideología es el poder. Es que da igual, por ejemplo, en el libro que escribí en ‘Los hijos del gran poder’ lo dejaba muy claro, que aquí los que mandan son los que tienen dinero, las familias, esas siguen. El poder va cambiando, con alternancias o no, pero la familia del poder siguen, el poder económico sigue.
P: Igual que hay familias que parece que consiguen mantener su fuerza en varias generaciones, por ejemplo, la familia Botín que va ya por la tercera generación y parece que sigue; en cambio hay familias, estoy pensando en la familia Polanco que parece que la siguiente generación no mantiene…
R: Normalmente, yo hice un estudio, son tres, cuatro generaciones las que suelen mantener el patrimonio, por media, y luego ya se dilapidan; sobre todo porque existen muchas discrepancias entre las familias, entonces tienes que tener una unidad como ha hecho Botín con sus hijos que obligó a firmar un documento, etcétera; para que no se dispersara la fortuna, incluso con unas cláusulas, etcétera.
P: Por meter también la parte política. Un político del que también se ha estado publicando mucho sobre su patrimonio es…
R: Bono
P: Porque se ha publicado que si tenía tantas propiedades, como el hipódromo…
R- Yo a José Bono le vengo investigando desde hace mucho tiempo, porque es de Albacete, como yo. Es un gran demagogo, como si fuera de los caciques de toda la vida. No se había bajado del coche oficial hasta el año pasado, que dejó el congreso. Ha estado toda su vida montado en el coche oficial. Ventitantos años al frente de una comunidad, es un cacique. A lo largo de esos años Bono ha conocido a muchas personas. No es lógico que un presidente se construya un hipódromo. Yo ya lo había contado, pero Bono tenía controlados a prácticamente todos los medios de comunicación. Y sobre todo los medios de su región.
P: Es que había una época en que los medios de izquierda, lógicamente no trataban muy mal a un político que era de izquierdas y los medios de la derecha también, porque se ve que tenían mucha simpatía por el Sr. Bono.
R: Bueno, Bono era muy amigo de Zaplana, de Gallardón. Con Zaplana tenía reuniones muy frecuentes en Madrid. Es que, es un personaje… sus raíces son las de un hombre de derechas. Bono, en el fondo, es un hombre de derechas. Tiene ideas muy católicas, estuvo a punto de ser seminarista. Y en el libro ‘Cabos Sueltos’, Tierno Galván lo pone como un traidor al Partido Socialista Popular (PSP), porque dice que le traiciona cuando se une a Alfonso Guerra y al PSOE. Su padre era falangista, alcalde de su pueblo.
P: Son las evoluciones… supongo que también habría hijos de izquierdas de padres de derechas
R: Eso es cosa de él, no quiero decir otra cosa. Quiero decir que está criado muy bien. Nunca ha pasado hambre.
P: Una cosa que se puede criticar de estas investigaciones es que sean campañas. Contra Bono, hubo primero un momento, en 1999, en que La Razón dedicaba todos los días una portada a atacar a Bono con su patrimonio, después desapareció el tema. Recientemente La Gaceta dedicó constantemente portadas contra Bono, pero después desapareció el tema. A la gente le llega la idea de «¡ah, esto es una campaña del medio!». Y el periodista de investigación puede decir: «¿Por qué a mi periódico le interesa un tema y ahora deja de interesar?»
R: El periodismo, como todo, también… ya ves las noticias… las buenas se agotan enseguida. Evidentemente, puede haber campañas, eso no lo vamos a negar. Estamos yendo hacia un periodismo de intereses. En mi caso, con Bono, yo lo estuve investigando durante mucho tiempo, pero como tú muy bien dices, a lo mejor hay un medio que en un momento le interesa, luego hay otro, y bueno, pero ahí estamos. Mientras que exista esa pluralidad, que cada vez es menor en nuestro país, pues bienvenida sea. Puesto que si un día no lo quiere uno, el otro querrá sacarlo.
P: Hay artículos suyos que nunca pasan con el tiempo, le leí uno en 2002, que se titulaba: «ayer ministro, hoy consejero», en el que se refería a casos como el de Licinio de la Fuente. Pero después ha seguido pasando, como por ejemplo Eduardo Zaplana…
R: A Telefónica
P: La pregunta ahí sería por qué interesa tanto tener políticos en los consejos de administración
R- Hemos visto las cajas de ahorros, es una vergüenza, la situación económica, la de Castilla-La Mancha, con el aeropuerto y no pasa nada. Esta gente está como Napoleón en la isla de Madeira.
P: Pero si usted es un César Alierta o el presidente de Gas Natural… ¿por qué le interesa tener a políticos, tipo Elena Salgado…?
R: No, es para situarlos. El tema es que se tienen que situar. Ahí tenemos el caso de Urdangarín, con Telefónica, que se le situa a través de Fernando Almansa. Buscan un hueco, a ver donde se le puede situar. Así todo, con los políticos. Enseguida se colocan, mira a Elena Salgado, a Solbes.
P: ¿Están tan controladas las empresas?
R: O si no te meten en el Consejo de Estado.
P: Siempre hay huecos
R- Siempre hay huecos, para ellos. Para eso tienen agenda los políticos
«LA ESFERA DE LOS LIBROS RETIRÓ DE MI LIBRO UN CAPÍTULO SOBRE URDANGARÍN»
P: Siendo uno de los periodistas que está investigando el llamado caso Urdangarín… la parte que a mí más me choca como lector es que los medios se están centrando mucho en Urdangarín y en Diego Torres. Que son los del Instituto Noos. Si el tema es dinero público, los que manejaban ese dinero público… es decir el Gobierno de Baleares o el Gobierno de Valencia, ¿por qué el foco no está en ellos, que son los que manejaban el dinero?
R: Vamos a ver, el caso Urdangarín yo lo vengo investigando desde hace muchísimo tiempo. Ya en 2006, en el libro «Los herederos del poder» sacaba algo de Urdangarín.
P: No le ha sorprendido a usted el estallido…
R: No, y luego en el 2009 intenté sacar en un libro llamado ‘Matrimonios S. A.’ quise dedicar un capítulo al caso de Urdangarín y entonces la editorial, que era La Esfera de los Libros, consideró que no había que sacar ese capítulo.
P: ¿La Esfera de Los Libros le quitó un capítulo que era precisamente de Urdangarín?
R: Sí. Al final lo logré meter a capón en otro capítulo dedicado a otra figura también vinculada a la Familia Real, pero la idea era que hubiera tenido un capítulo propio, en el 2009. Aún no había saltado el caso Noos. Tengo información del tema bastante buena. ¿Qué pasa en el caso Urdangarín? Que ha habido una utilización total de la tarjeta de visita de la Casa Real. ¿Qué estuviera detrás Su Majestad? Todavía no lo sabemos. Ojalá leamos los correos de Diego Torres. Pero que detrás de la contratación de Urdangarín había una tarjeta de visita de la Casa Real y que los empresarios aprovechaban eso, está claro. ¿Tú consideras que la familia Roig, que son empresarios, con Mercadona, con el estadio… dan 600.000 euros así como así?
P: Si no piensan…
R: Si no piensan que van obtener algo. Y Matas quería a Urdangarín al precio que sean, porque consideraba que iba abrir puertas. Y consideraba que para Baleares iba a ser bueno. Y Camps y Rita Barberá, que cuenten por qué contrataron a Iñaki Urdangarín. ¿Quién les llamó? ¿Por qué el juez Castro no investiga…?
P: Eso quería preguntar… el juez Castro ha imputado a Matas, pero no ha querido imputar a Francisco Camps
R- Pues muy sencillo. Porque perdería la competencia. Pasaría lo mismo que con la Gürtel. Se le escapa el caso, perdería el caso y pierde el protagonismo. Si llama a Camps, Camps es aforado y el caso se iría al Tribunal Superior de Justicia de Valencia y perdería el caso. Esa es la clave por lo que en estos momentos Pepe Castro no llama Camps, porque perdería todo.
P: Si llama a alguien de arriba, lo pierde.
R: A Camps. Si lo llama como testigo, se puede meter en un follón, debería llamarlo como imputado, para que esté asistido, pero si lo llama se ha acabado José Castro. Porque la pieza de Valencia se iría al TSJ de Valencia, como con la Gürtel. La Gürtel se divide y todo se diluye…
P: Una pieza judicial (‘talde’) por aquí… otro por acá…
R- Claro, esa es la clave.
P: Ya terminando, alguien como usted que ha pasado mucho por los tribunales, qué opina sobre el funcionamiento de la Justicia. Ahora que son tan criticados, hablamos ahora de un juez instructor… en su caso ¿qué le parece el funcionamiento de los juzgados?
R: De entrada yo creo en la justicia.
P: No es pesimista.
R: Lo que pasa es que los jueces también son personas, son humanos y también tienen sus flequitos, sus amigos, sus cosillas. Los jueces son humanos y tienen sus defectos. Ahí está el caso de la judicatura de Marbella, el escándalo de cómo se filtraban…
P- Ha habido un juez, recientemente condenado…
R- El juez Urquía. Entonces, bueno, hay que creer en la justicia
P: Bueno, Juan Luis, creo que es usted uno de los periodistas que más libros de periodismo de investigación ha escrito. No sé si tiene en mente alguno que se pueda adelantar.
R: ¿Sabes lo que pasa? Que ahora no tenemos tanta libertad. Ahora, si quieres escribir un libro interesante, a las cuatro editoriales que hay no les interesa tanto el periodismo de investigación. Porque estamos viendo que los libros que hay ahora mismo son biografías, corta-pegas, no hay como esa época en que los libros eran la base de la historia de España, como aquella colección de Temas de Hoy que sacó Imelda Navajo cuando estaba en Planeta, que era brutal. Se narraban uno tras otro todos los personajes: Miguel Durán, Jesús Gil, Javier de la Rosa, los Albertos. Se ha perdido eso ya. Las editoriales no quieren y los personajes los paran. Un libro verdadero sobre Amancio Ortega, se han escrito algunas cosas, pero no se ha escrito nada. O en el caso de Ruiz Mateos, son libros que los propones, pero no interesan.
P: Podríamos ser malpensados y decir que hay manos negras… o quizá lo que pasa es que dicen «No, no es comercial»
R: Sí, dicen que «no es comercial»
P- Pero eso sería culpa del público ¿qué ha pasado para que al público ya no le interese?
R: Pero los libros de biografías, que están saliendo tantos, no les van bien. El de Arancha no ha ido bien, el de Ana Obregón tampoco. Todas estas tonterías no van. Se ha perdido una base muy importante. Porque el periodismo de investigación en libros ha marcado muchos casos, muchos casos de investigación en España se basaron en libros.
P: Esperemos que se invierta la tendencia
R: Esperemos.
P: Juan Luis, muchas gracias por haber aceptado la invitación de Periodista Digital
R: Nada, un placer.
P- Esperamos tenerle de nuevo por aquí si hay novedades
R- Muchas gracias y enhorabuena.
Entrevista realizada con la colaboración de Marina López.