La editorial Planeta acaba de sacar ‘Del Boom a los Recortes’ una selección de las mejores entrevistas del XLSemanal seleccionadas por la periodista Virginia Drake (que es autora de muchas de ellas), en lo que supone un interesante repaso a los últimos 25 años de nuestra historia, que son los años de que lleva existiendo XLSemanal.
Las entrevistas suponen un retrato de personalidades del mundo político, cultural, deportivo y religioso de España, así como de sus contextos, incluye a personas como Felipe González o Mariano Rajoy, o figuras ya desaparecidas que no se caracterizaron por ser muy accesibles a conceder entrevistas, como el caso del duque de Alba, Jesús Aguirre o de José María Entrecanales, el ‘padre’ de Acciona. En palabras de Virginia Drake a Periodista Digital «Cada una de las 50 entrevistas de este libro es una pequeña joya. Muchas de las cosas que dicen siguen siendo totalmente válidas en la actualidad».
Biógrafa de Esperanza Aguirre
Entre las entrevistas destaca una entrevista conjunta realizada por la propia Virginia Drake a Esperanza Aguirre y Alberto Ruiz Gallardón. En 2006, Drake publicó una biografía de Aguirre que desató las iras de Gallardón y llegó a Rajoy a decir su célebre «Jodér, que tropa», emulando a Romanones.
Por su interés reproducimos la parte de la entrevista de PD en la que habla de esta destacada política.
P- Una de las entrevistas que más llamará la atención a los lectores, es la entrevista a dos de Alberto Ruiz Gallardón y Esperanza Aguirre, habrá algún diablito que pueda pensar que usted ha tomado parte en alguna de sus guerras.
R- Tomar parte no. Cuando escribo un libro no es para reafirmar ni confirmar ninguna idea mía. Sino porque se presenta una ocasión que me parece interesante y la hago. La verdad es que esa entrevista, desde que publiqué la biografía de Esperanza Aguirre en la que Gallardón no quiso participar – al principio Gallardón dijo que haría la presentación del libro y, al conocer lo que se decía el libro se negó y se echó atrás – llevaba queriendo entrevistarles a los dos juntos. Me apetecía hacerla, pero tuve que esperar tres años, tres años intentándolo, gracias a la insistencia de la directora de XLSemanal. Esa fue una entrevista que perseguimos durante tres años y que Esperanza Aguirre nunca quería hacer. Una vez que Esperanza Aguirre me rechazaba, ya ni intentaba buscar a la otra parte. Pero, tras tres años detrás de ellos y poco antes de unas elecciones ya dijo ‘si el alcalde quiere, estoy dispuesta’. Entre que el medio les gustaba y que fue el primer ‘Sí’ de Esperanza, al alcalde casi le obligamos a decir que sí, no puso ningún problema.
P- Quizá una de las frases más duras la dice el propio alcalde en su primera respuesta con la historia de su señora.
R- ¿La de la música? Sí. Aquella fue una entrevista deliciosa. Reunimos a los dos [Aguirre y Gallardón] cuando salían de un acto, era la primera vez que posaban y se les veía con unas complicidades y, a la vez, con unas puyas políticas. Yo creo que en el terreno personal se tienen aprecio y en el terreno político tienen grandes cosas que les separan.
P- Los que no conocemos las historias que pasan en el terreno interno…
R- Sí las conoces
P- Más o menos. Pero el origen de la riña fue su libro. Porque el congreso en el que se enfrentan Cobo y Esperanza Aguirre es en 2008. Pero dos años antes saca usted su libro en el que se cuentan cosas que dice Esperanza Aguirre y que no dejan muy bien parado a Gallardón, porque dice que conocía con anterioridad que dos diputados del PSOE iban a dar el plante al que entonces aparecía como inminente candidato a presidente. Algo que dejaba en entredicho las palabras de Gallardón de que no tenía nada que ver con el tema. ¿Fue así?
R- Es exactamente como has dicho. Las diferencias y el distanciamiento entre Alberto Ruiz Gallardón y Esperanza Aguirre empieza en 2003 cuando Gallardón le sugiere a Esperanza que gobierne en minoría forzando a que dos diputados del PP (los mismos que ha perdido el PSOE) se silenciaran. Y Aguirre lo que dice es que se repitan las elecciones. Además, Esperanza Aguirre se entera que Gallardón conocía la historia del ‘Tamayazo’ antes de que se produjera y no le había dicho nada. Ahí es donde empiezan las diferencias que yo cuento en mi libro en 2006 y se arma aquello. Pero luego hay muchas más. Hay un momento en que Gallardón le dice a Esperanza Aguirre, ‘¿Pero qué tengo que hacer para que me apoyes?’ y ella responde ‘hacerte liberal’. Porque ella tiene unos principios muy claros en cuanto a bajar impuestos y eso le ha hecho tropezar con políticas de Gallardón. Al margen de que Gallardón ha tenido la habilidad de llevarse extraordinariamente bien con los políticos que se han llevado extraordinariamente mal con Esperanza Aguirre.
P- ¿Cómo por ejemplo?
R- El Sr. Ruiz Gallardón tenía una amistad muy estrecha con Bono y José Bono dijo que Esperanza era un animal que besaba de día y mordía de noche. Cosas así, machistas y terroríficas. El Sr. Ruiz Gallardón tuvo especialmente buena relación con el Sr. Zapatero, que era la bestia negra de la presidenta de la comunidad. En el terreno político más cercano tienen grandes diferencias. Luego, además, los equipos de cada uno de ellos se hacen eco de esos. Y en muchas ocasiones van más allá de la rivalidad que se tienen sus jefes.
P- En una ocasión Ignacio González dijo que cuando oía a Ruiz Gallardón le parecía estar escuchando a Pepiño Blanco. Y luego Manuel Cobo superó a todos con aquella entrevista en El País donde dijo lo que dijo.
R- Hay una anécdota fantástica que hace entender ahora muchas cosas. Cuando Esperanza Aguirre está en el ministerio de Educación y Cultura y Cascos está en la vicepresidencia y secretaría general del PP. Mariano Rajoy es el ministro de Administraciones Públicas y le corta todas las iniciativas al ministerio de Educación y Cultura en el que estaba de sub Ignacio González. Hasta el punto de que Cascos me reconoció que nunca había visto una oposición tan dura de un ministro, Rajoy, a otro ministro, Esperanza Aguirre.
P- ¿Cual era la diferencia entre ambos?
R- Esperanza Aguirre pensaba que las autonomías tenían que recibir una serie de ayudas concretas, mientras que el Sr. Rajoy pensaba que las propias autonomías tenían que decidir hacia donde enfocar esas ayudas y no que las indicara el ministerio. Y luego algunos proyectos de Cultura y que necesitan el visto bueno de Administraciones Públicas y Rajoy no se lo da. Cuando Esperanza Aguirre deja el ministerio de Educación y Cultura para irse al Senado, es Mariano Rajoy el que pasa a ser el nuevo ministro de Educación y Cultura.
P- ¿Ignacio González se quedó entonces en Educación y Cultura con Rajoy?
R- Ignacio González pasa a ser rescatado por Ángel Acebes, que lo ficha, precisamente, para el ministerIo de Administraciones Públicas. En la primera reunión que tienen, Ignacio González le dije a Mariano Rajoy: «No te preocupes, que seguiremos vuestra línea, os apoyaremos tanto como nos apoyasteis nosotros». Fíjate ahora, mirando todo eso, como se entienden muchas cosas.
P- Quizá merecería otro libro lo que pasa en el año 2008. Que comienza en enero con la exclusión de Gallardón de las listas del PP, apareciendo como ‘el verso suelto discrepante de Rajoy’, mientras que Esperanza Aguirre parece la leal al líder. Y unos meses después, tras el congreso de Valencia, será Aguirre la que pase a ser el ‘verso suelto discrepante de Rajoy’ y Gallardón el leal que está al lado del líder y, de hecho, ahora es ministro.
R- Apasionante la política. Pero ahora Gallardón es un ministro al que le están haciendo comulgar con ruedas de molino. No sé si es que le han puesto ahí para que termine de romper su imagen de persona abierta con alguna posibilidad de llegar al poder. Porque con el tema de los jueces, o de los homosexuales, le están haciendo adoptar una posiciones muy diferentes a las que tenía en el ayuntamiento, cuando era mucho más flexible. Todos aquellos amigos que tenía en la izquierda, hoy le dan palos como no le han dado en su vida.
P- Luego está el capítulo de los medios. En el caso de Ruiz Gallardón se habló de su buena relación con PRISA, que era el grupo que más atacaba a Esperanza Aguirre y en el caso de Esperanza Aguirre tenía amistad personal con Federico Jiménez Losantos, que era quién más atacaba a Ruiz Gallardón. Y cuando le atacaba ella no decía nada, lo que hacía dar la impresión de que estaba de acuerdo.
R- Extraños compañeros de cama. De todas formas, los medios de comunicación los usan más los políticos a los medios, que los medios a los políticos. También hubo una época en que al ABC se le llamaba ‘gallardonaceo’ y a El Mundo se le consideraba ‘aguirrista’ ¿no? Tampoco creo que El Mundo fuera tan ‘anti-gallardón’ y ABC tan ‘anti-esperanza’. Pero sí es verdad que dentro del PP hay muchas sensibilidades. Dentro del PP, Esperanza Aguirre siempre ha dicho que ‘quién se mueve si sigue saliendo en la foto’ al contrario de lo que decía Alfonso Guerra en el PSOE. Por eso ella nunca ha tenido pelos en la lengua.
P- En un momento en su entrevista con Gallardón en ‘Del boom a los recortes’ él dice que a lo mejor tiene más información usted que él.
R- Gallardón es un gran cínico en ese sentido. Yo nunca tendré más información que él en algo de lo que él es el protagonista. Bueno, más que cínico, la palabra sería irónico.
P- Ahora Esperanza Aguirre está retirada, entre comillas…
R- Muy entre comillas diría yo…
P- ¿Se mueve tras las bambalinas?
R- Esperanza Aguirre no está retirada de nada. Ha dejado la comunidad de Madrid por varias razones. Una de índole personal, porque tiene una enfermedad de la que debe recuperarse. El último año de Esperanza Aguirre, después de las elecciones ya había bajado la intensidad. Pero eso nunca hubiera sido suficiente para retirarse si no hubiera estado en la Moncloa un presidente del Gobierno con el que se entiende poco y con el que no comparte sus medidas para resolver la crisis. Aguirre no tuvo reparos en criticar la subida de impuestos, lo de Bolinaga o apoyar a Cascos en el tema de Asturias. No era el mejor momento para que Esperanza siguiera ahí. Las razones políticas se unieron a las personales. Pero hasta el 2015 ha dicho que seguirá siendo presidente del PP de Madrid y nos sigue regalando a los periodistas declaraciones estupendas y titulares que nos dan mucho juego. Yo no descarto ninguna posibilidad si el partido le pide que de un paso al frente. Y desde la retaguardia, sin quemarse, puede, en un momento determinado, si cae Rajoy, podría dar un paso al frente. Pero a corto plazo no es probable, porque Rajoy a día de hoy no está cuestionado dentro del partido.
P- Poco después de que usted estuviera en ‘El Gran Debate’ entrevistamos en Periodista Digital al Sr. Sotillos que se mostró muy disgustado a la mención que se le hizo en el tema de ‘Sara Mago’. De que él era el responsable del bulo de que Esperanza había llamado a Saramago ‘sara mago’.
R- Yo no estaba debajo de la cama con lo que no tengo ni idea de lo que se fraguó allí, lo que digo y repito es que Esperanza Aguirre, cuando hicimos la biografía, ella me dijo que tenía constancia de que aquello había sido una forma de expresarse de Sotillos, que había dicho ‘es tan inculta que debe creerse que Saramago es una cantante». A partir de ahí alguien cogió la anécdota, fue mutando de oreja a oreja y acabó haciendo verdad que Esperanza Aguirre había dicho lo de Sara Mago. Ella me juró que nunca había dicho eso, así como sí reconoció multitud de meteduras de pata con Santiago Segura, Airbag..
P- ‘Santiago Segura, no sé quién es’, dijo entonces.
R- Era una época que además el ‘Caiga Quién Caiga’ [Globomedia] se nutrió mucho de Esperanza Aguirre, que no tenía mucha experiencia en los medios ese momento. Pero esta, precisamente, como la niega, es la que más se ha repetido. A Esperanza le consta que lo dijo Sotillos. Y, mira que Sotillos fue mi director de RNE, sé que él dice que no es verdad. Pero yo no creo que Esperanza mienta en algo así. Sí me pega que Sotillos dijera ‘este es tan tal… que exagerara.
En su entrevista en Periodista Digital, Eduardo Sotillos dio su versión: «En 1994 declararon a Lisboa capital cultural. Fui con mi mujer, que era periodista. Y en la mesa estaba Esperanza Aguirre y estaba yo. Yo miré quienes estabamos y dije ‘como siempre, en un acto cultural sólo estamos periodistas y políticos. Y ni está Saramago’. Entonces ella contestó: ‘¿Quién es Saramago? ¿Un director de cine?’.
«Luego lo comenté en una conferencia que las relaciones entre Portugal y España culturalmente eran escasas y puse como ejemplo que Esperanza Aguirre no sabía quién era Saramago. Los que lo escucharon, que eran unos periodistas y escritores que no diré quiénes eran, fueron los que decidieron que esa anécdota no era suficientemente graciosa y fueron los que se inventaron que ella en verdad había preguntado ‘¿Quién es Sara Mago?’ Pero no era verdad».
Las entrevistas a Esperanza Aguirre y Alberto Ruiz Gallardón son sólo unas de tantas entrevistas de la obra recopilada por Virginia Drake, en la que también figuran actores como Antonio Banderas o Carmen Maura o hasta figuras religiosas como Antonio María Rouco, realizada por Concha García Campoy, todas ellas recogidas en la obra ‘Del Boom a los Recortes’.